Desde la psicología social, sostiene López-Sáez, esta especie de turismo cultural exprés o turismo del selfie puede entenderse como una respuesta a la ansiedad contemporánea por no ‘perderse nada’. Un temor, dice, alimentado por las redes sociales y la cultura de la inmediatez, que nos empuja a vivir experiencias estandarizadas, compartibles y fácilmente certificables ante los demás. “Como apunta Remedios Zafra existe una tensión constante entre el deseo genuino y la obligación de representarse permanentemente como sujetos activos, cultos, inte