Durante más de un siglo, el Alzheimer se ha considerado irreversible. Un estudio de la Universidad Case Western Reserve desafía este dogma al mostrar, en modelos de ratón, que la pérdida del equilibrio de NAD+ —una molécula clave de energía celular— impulsa la enfermedad. Al restaurar ese equilibrio con el fármaco P7C3-A20, no solo se previno el Alzheimer, sino que se revirtieron daños cerebrales y déficits cognitivos incluso en fases avanzadas, abriendo la puerta a futuros ensayos clínicos en humanos. En español:
bit.ly/3LgIIPS