En esta línea, la portavoz de la asociación, Carolina González, ha señalado que “no se ha querido escuchar” al menor, quien, según ha explicado, expresó verbalmente su oposición a marcharse con su padre pocos días antes de la entrega. Ha señalado que, de haberse tenido en cuenta su testimonio, “no estaría hoy en Italia con su supuesto agresor”. González ha advertido de que este caso no es aislado y ha recalcado que la violencia vicaria “afecta a miles de mujeres y menores en todo el mundo”.