En un auto emitido este mismo miércoles, la jueza instructora señala que la prueba solicitada por el investigado "no es sino la muestra de la carencia de argumentos de la defensa, que aparte de acompañarse de un anuncio de acciones (no sabemos de qué tipo), es acompañado por un ataque directo a la persona del testigo". Un ataque ad hominem, dice, "ante la imposibilidad, o directamente la impotencia, de rebatir mediante datos, hechos o conocimientos científicos, su declaración", poniendo "en tela de juicio su estado mental".