Los documentos hechos públicos tras la orden ejecutiva de Donald Trump, que desclasificó más de 1,100 archivos relacionados con el asesinato de John F. Kennedy en 1963, no solo abordan el magnicidio del 35º presidente, sino que también exponen operaciones encubiertas diseñadas para manipular la percepción pública, desestabilizar economías, sabotear industrias claves y emplear armas biológicas contra Cuba.