“Si tus olas en alguna parte están furiosas, más lejos, en alguna otra zona, están en la calma más completa”. Ésta es una de las frases que, en pleno arrebato romántico, Isidore Ducasse dedicaba al océano en el primero de Los cantos de Maldoror. Si algún día, dentro de muchos años, cuando los investigadores puedan acceder libremente a la información clasificada, alguien se decide a escribir un libro sobre el sabotaje al Nord Stream, podría usarla como cita al comienzo del mismo y añadir inmediatamente su continuación: “No eres como el hombre qu