Me vine desde Barcelona hace casi 32 años. Por amor. No por la ciudad, aunque acabé amándola también, sino por una persona. Dejé el Mediterráneo por la lluvia perpetua, el bullicio por el silencio de piedra, y la familiaridad por lo desconocido. Y durante años, muchos años, pensé que había sido la mejor decisión de mi vida.
Ahora me voy. Y lo hago desencantado.
No me voy de Galicia, pero sí de esta ciudad que ya no reconozco. De este Santiago que se ha vendido al mejor postor, que ha sacrificado su alma en el altar del turismo masivo y la especulación inmobiliaria. Me voy porque después de más de dos décadas aquí, siento que la ciudad me expulsa con la misma indiferencia con la que ahora trata a sus vecinos.
La gentrificación y la turistificación no son palabras abstractas cuando las vives en tu propia carne. Son el bar de barrio que cierra para convertirse en una tienda de souvenirs. Son los vecinos de toda la vida que se marchan porque ya no pueden pagar el alquiler. Son las calles del casco histórico convertidas en un parque temático para peregrinos con prisa y turistas de selfie.
Santiago se ha convertido en una postal, en un decorado. Y los que vivíamos aquí hemos pasado de ser ciudadanos a ser figurantes molestos en la escenificación de una ciudad patrimonio de la humanidad que ya solo se piensa para ser consumida, no para ser habitada.
¿Dónde quedó el Santiago de las conversaciones largas en los bares, de los vinos en el Franco, de los mercados de abastos con vida real, de los barrios con identidad propia? Lo sepultaron bajo capas de pintura para fachadas turísticas y terrazas invasivas. De pisos de AirBnB ilegales. De mala educación e incivismo.
Y la gestión municipal... no voy a ser hipócrita: ha sido desastrosa. Salvo honrosas excepciones. Xerardo Estévez fue, sin ninguna duda, el mejor alcalde que ha tenido esta ciudad. El único que entendió que Santiago necesitaba modernizarse sin perder su esencia, que el progreso no está reñido con la memoria, y que una ciudad es ante todo su gente.
El resto ha sido una sucesión de mediocridades, de decisiones cortoplacistas, de políticas que han priorizado el beneficio inmediato sobre el proyecto de ciudad a largo plazo. Han dejado que Santiago se convirtiera en rehén de intereses particulares, que el centro histórico se vaciara de vida auténtica, que los barrios periféricos quedaran abandonados a su suerte.
Han gestionado Santiago como si fuera un negocio, no como si fuera un hogar para miles de personas.
Pero seamos honestos: los políticos municipales no han estado solos en este desastre. Detrás de cada decisión urbanística calamitosa, de cada ordenanza que prioriza el negocio sobre la convivencia, están los lobbies. Y muy especialmente, el de la hostelería.
El lobby hostelero ha secuestrado Santiago. Ha conseguido que la ciudad se piense exclusivamente desde la lógica de la terraza, del consumo, del turista que llega, gasta y se va. Han convertido el espacio público en extensión de sus negocios privados, han llenado las calles de ruido y basura, y han presionado para que cualquier regulación mínima sea vista como un ataque a la economía local.
¿Peatonalización? Solo si beneficia a los bares. ¿Horarios razonables? Imposible, perjudica al sector. ¿Protección del comercio local frente a franquicias turísticas? Ni hablar. El resultado es una ciudad rehén de unos pocos que han confundido el interés particular con el bien común, y unos políticos demasiado débiles o demasiado cómplices para plantarles cara. ¿Tasas turísticas? Lo han tratado de impedir por tierra, mar y aire. ¿Acaso en Francia se equivocan cuando se aplican las Tasas turísticas?
Y en esta alianza del dinero, no podemos olvidar al Arzobispado. Ese poder en la sombra que gestiona un patrimonio inmenso y que convive perfectamente con el negocio turístico-hostelero. Al fin y al cabo, ambos viven de lo mismo: de la explotación del Camino, de la mercantilización de la espiritualidad, de convertir Santiago en producto de consumo.
La Iglesia controla gran parte del suelo y los edificios del casco histórico, pero ¿cuándo ha alzado la voz contra la degradación de la ciudad? ¿Cuándo ha defendido a los vecinos frente a la especulación? Nunca. Porque el modelo les viene bien. Peregrinos que gastan, turistas que consumen, hostales y tiendas de recuerdos en locales eclesiásticos. Una simbiosis perfecta entre la cruz y el negocio, mientras Santiago se desangra.
Me llevo conmigo la Quintana de Mortos. Esa plaza donde el tiempo parece detenerse, donde la piedra cuenta historias de siglos y donde he pasado horas mirando la luz cambiar sobre esas piedras. Me llevo las tardes infinitas en el Parque de Bonaval, ese espacio que es al mismo tiempo cementerio y jardín, muerte y vida entrelazadas, el lugar más honesto de toda la ciudad.
Esos espacios me dieron lo que la gestión municipal nunca supo dar: un sentido de pertenencia, un lugar donde ser yo mismo, donde la ciudad hablaba en voz baja y había que saber escuchar.
Me voy con rabia e indiferencia sí. Pero también con gratitud por los años buenos, por las amistades que permanecen, por todo lo que aprendí en esta ciudad de lluvia y piedra. Santiago no me dio mucho, pero llega un momento en que hay que saber marcharse.
No me voy de Galicia porque aquí sigue estando mi vida, mi familia, mi gente, mis raíces de los últimos 32 años. Pero me voy de Santiago porque ya no puedo ver cómo siguen destruyendo lo poco que queda de la ciudad que un día amé.
A los que se quedan, a los que resisten: que no os venzan. Que sigáis luchando por un Santiago que vuelva a ser ciudad y deje de ser negocio. Que recupereis los barrios, las plazas, las calles. Que la memoria de lo que fue os dé fuerzas para construir lo que puede ser.
Yo me voy. Pero me llevo conmigo al Santiago verdadero, el que conocí, el que viví. Ese nadie me lo puede quitar.
"Santiago de Compostela. Un lugar donde todo cambia para que todo siga igual que siempre." Espero y deseo que algún día este dicho, deje de ser una realidad.
Chat Control se vota el 14 de octubre en el Consejo de la UE y el 15 en la comisión LIBE del Parlamento Europeo. Como has oído. Quedan exactamente seis días para que se vote en el Parlamento Europeo una ley que viola los derechos constitucionales de todos los Europeos y siete para que el Parlamento dé el paso clave antes del pleno final.
Ante la prácticamente inexistente cobertura mediática, me veo obligado a informar a través de estos artículos.
La versión danesa del Reglamento CSA obligará a todas las plataformas de mensajería a escanear incluso los chats cifrados de extremo a extremo antes de enviarse (client-side scanning). Tu móvil revisará tus fotos y mensajes antes de mandarlos; si el algoritmo detecta contenido sospechoso, la plataforma podrá entregarlo sin orden judicial previa.
Son muchas las voces en contra de este movimiento tecnofascista en el seno de la EU. La más notoria ha sido la carta de Signal:
signal.org/blog/pdfs/germany-chat-control.pdf
Lo que proponen es, en efecto, una vigilancia masiva sin restricciones, abriendo las comunicaciones íntimas y confidenciales de todos, ya sean funcionarios gubernamentales, militares, periodistas de investigación o activistas. A pesar de todo lo que Europa habla de soberanía, esta es una extraña decisión de ciberseguridad en múltiples frentes.
En un artículo previo explicaba que Alemania se había posicionado en contra, lo cual suponía una minoría necesaria para parar la propuesta: www.meneame.net/story/minoria-parar-atropello. Unos días después, Alemania se desdijo para volver a una posición de indecisión.
Ayer mismo, en declaraciones oficiales, el eurodiputado Alemán Jens Spahn confirmo que la coalición CDU/CSU votara en contra:
bsky.app/profile/eckstein.bsky.social/post/3m2m73jqlcs2t
Desde el grupo parlamentario de la CDU/CSU, nos oponemos firmemente a la monitorización indiscriminada de chats. Sería como abrir toda la correspondencia de forma preventiva para ver si contiene algo ilícito. Eso es inaceptable y no lo consentiremos.
También, Eslovenia declaró de forma oficial estar en contra de la propuesta:
n1info.si/novice/slovenija/slovenija-vendarle-sprejela-odlocitev-o-ure
El mapa queda de esta manera:

Con esta disposición se podría parar la propuesta. Pero teniendo en cuenta que hablamos de políticos, no debemos confiarnos.
Pese a haberles enviado correos de forma masiva, y a menos de una semana para la votación, la mayoría de nuestros representantes no se han posicionado. No tengo claro si es una cuestión de dejadez de sus funciones, pasotismo o simplemente se deben a acuerdos políticos en la sombra.
Enviar un correo a nuestros representantes y llenarles la bandeja con estos es probablemente la mejor opción, deben saber que el pueblo no aprueba sus desmanes:
¿Son palabras vacías las de combatir el fascismo o es simplemente una impostura de cara a la galería? Esta es una amenaza real, tangible y efectiva, que viene desde dentro del mismo seno de la UE y nuestros representantes ignoran al pueblo y hacen mutis en el foro.
Como he leído del orden de veinte artículos al respecto, uno al trimestre, por lo menos, y como el márketing indica que hay que decir que lo que tú opinas es lo verdadero, porque si no, a ver por qué te van a leer a ti en lugar de a los veinte anteriores, voy a poner mi granito de arena, o mi boñiga, en este muladar de subjetivismo.
La verdaderas razones del declive de Menéame son muchas, muchísimas, pero creo que hay cuatro principales:
-Que se fundó hace muchísimos años, una puta eternidad para lo que son los ciclos de producto de este ecosistema. El solo hecho de que esté en declive y no muerto, enterrado y convertido en silicato informático, ya es bastante para felicitarse cien veces. ¿Cuántas comunidades existen de una edad parecida? ¿Dónde están las demás? En el museo arqueológico, joder. En distintas necrópolis. En diversos cenotafios. Así que estar vivos, o malviviendo en un geriátrico, ya es bastante razón para felicitarse. ¡Enhorbuena!
-Los usuarios somos unos carcas. Sí, viejos, viejales, vetustos y viejunos. ¿Cómo coño no va a decaer una comunidad donde hay más salidas por defunción que entradas por interés? Seguramente exagero, vale, pero a fuerza de hablar con gente, la media debe de estar por cuarenta y ocho o cincuenta años. Ricardo Galli cumple mañana sesenta tacos, joder. (Felicidades, padre). Y mejor no le preguntamos a Benjamí cuantos tiene, porque no andará muy lejos, ya que la gente se junta muchas veces por rango de edad. Andamos todos por ahí, así que sí, oye: la comunidad está en declive porque nosotros estamos en declive. Sorpresazo, ¿eh?. Y las cosas de las que hablamos, los temas que nos interesan, el modo de abordar esos temas y los argumentos y hasta el vocabulario que utilizamos, son de nuestra generación. Viejunos. Carrozas. Apolillados. Hay sinónimos de sobra.
-Aquí se lee. En un ecosistema informativo donde primero se le dio prioridad a la imagen y luego al vídeo, resulta que estamos en una comunidad donde la comunicación es por escrito. No tenemos nada que ver con las tendencias actuales, y si de veras el medio es el mensaje, resulta que nuestro medio, la palabra escrita, está medio caducado y genera distintos grados de rechazo entre los más jóvenes. No puede dar más o menos por el culo, pero es así. La gente quiere mirar un vídeo, a ser posible de dos minutos, darle a un botón para reaccionar, que le caigan unos cacahuetes de dopamina, y seguir al siguiente estímulo. Aquí hay noticias con doscientos cincuenta comentarios. No me jodas.
-Aquí se escribe. Y eso es todavía peor, dios mío. Aquí se le dan hostias hasta en el cielo de la boca al que no sabe escribir correctamente, pone abreviaturas, o mete una falta de ortografía. Aquí hay que saber estructurar tus ideas y expresarlas por escrito, de manera que no venga el cabrón de turno a darle tres vueltas de torno a tu gramática o a tus huevos, según le dé. Eso es algo que detesta buena parte de la gente que podría unirse a la comunidad y que no se queda después de registrarse, porque en cuanto hace el esfuerzo de juntar tres líneas se siente medio subnormal ante las risas de los que le han leído. No es elitismo, sino simple realidad: a muchísima gente por debajo de los cuarenta le cuesta expresarse por escrito, ya sea porque utiliza el móvil, con su mierdoso teclado, o porque no tiene ese hábito.
Así que sí: somos una especie de tabernáculo monástico, y estamos en declive. Porque somos viejos, porque hacemos cosas de viejos, porque estamos entre cuatro paredes viejas. Eso, justamente, es la definición de declive.
¿Pero quién quiere vivir para siempre? Yo no, os lo juro.
A colación de esta noticia: www.elespanol.com/el-cultural/letras/20251014/finalistas-premio-planet
Siete han sido los miembros del jurado y 1320 los manuscritos presentados para esta edición, record absoluto.
Esto significa que han tenido que leer 3,61 libros al día para poder leerlos todos lo que equivale a 4,43 horas para poder leer un libro si les damos 16 horas de lectura y 8 horas libres al día para poder dormir, comer, ir al baño, ducharse, sacar al perro, llevar los niños al colegio, cepillarse los dientes y ver Antena 3.
Si, en cambio, lo que han hecho ha sido repartirse el número de libros, entonces cada miembro del jurado ha debido leer 188,57 libros lo que equivale a 0,51 libros al día, algo mucho más asequible. Esto significa que han tenido unas 31,37 horas para poder leer cada libro, a razón de 16 horas de lectura al día.
Andaba yo por twitter cuando me encontré este escueto tuit de Irene Montero respondiendo al Coronel Baños, propagandista de la ultraderecha putinista y fiel escudero de Iker Jiménez en su programa sobre fantasmas y chips en las vacunas x.com/IreneMontero/status/1976314962760044813
Para quien no quiera entrar en twitter, copio el mensaje del Coronel:
Señora Montero, con humildad y respeto, me atrevo a recomendarle que lea y divulgue.
Con adecuado conocimiento sobre cómo se creó, expandió y consolidó el Imperio hispano, con sus más luces que sombras, es muy probable que cambie de opinión en cuanto al significado de la civilización que somos los pueblos hermanos que conformamos la Hispanidad.
Comenzando por hablar de Hispanoamérica y no de América Latina.
Gracias.
Saludos cordiales.
Y le adjunta una foto de la portada de un libro escrito por él.
Montero le responde:
Un día más, los hombres me explican cosas.
Habréis visto que Baños me cae rematadamente mal. Pero la respuesta de Montero da vergüenza ajena. Alguien le expone argumentadamente que no concuerda con su postura. Y ella, en lugar de responderle, se escuda burdamente en su condición de mujer para, de forma falaz, acusarle de mansplaining y rehuir el debate dejándole (más bien pretendiendo dejarle) mal. Como eres un hombre y yo una mujer, si me rebates sobre una cuestión que afirmas haber estudiado explicándome tu punto de vista (algo que desde hace milenios llevamos haciendo los seres humanos con total naturalidad), estás siendo machista y eso te desautoriza y deja sin valor tu razonamiento. Si, siendo una mujer, hubieses hecho exactamente lo mismo, no tendría nada que reprocharte y no me quedaría más remedio que entrar en el debate. Absolutamente delirante, y sobre todo burdo, patético y trapacero.
Esto me recuerda a la infinidad de veces en las que Iglesias, Montero o cualquier cargo de Podemos, han respondido con estruendosas acusaciones de machismo a quienes cuestionaban la capacidad de Montero para ser la número 1 del partido, y vinculando su posición a su relación de pareja con Iglesias. Otro tabú empleado como excusa barata para rehuir el debate racional. Se supone que, si eres mujer y alguien piensa que no tienes el mérito y la capacidad para ocupar un cargo, está prohibido criticarte, aunque ello implique construir un telón de acero que impida denunciar una amplia porción de los casos de nepotismo y endogamia que, en este país nuestro, son tan comunes, y que siempre tienen el denominador común de una persona en una posición de poder (hace décadas casi todos hombres, pero ahora también mujeres) y un enchufado que está donde está por su relación familiar o sentimental con él.
Desde mi perspectiva, esto es prostituir el feminismo y degradar a la mujer a la condición de frágil florecilla ("a mí no me preguntes, sólo soy una chica") que no puede sufrir los mismos embates dialécticos que el hombre. No se le puede rebatir con argumentos cuando se piensa que está equivocada (si quien le rebate es un hombre) ni se puede cuestionar su idoneidad para ocupar un cargo aun cuando nos parezca evidente. En el fondo, es usar un noble movimiento de emancipación como carta trucada de tahúr. Y eso lo desprestigia y refuerza a quienes lo odian. Pero creo que a Montero le da igual.
Leía el otro día que Trump anuncia despidos masivos «orientados a los demócratas» por el cierre de Gobierno. Sin embargo, un meneante señalaba algo así como «tranquilos, que el voto es secreto». Inmediatamente, pensé en lo fácil que sería adivinar a quién vota cada cual. Posteriormente, leyendo el último libro de José Antonio Marina, encontré el párrafo que copio a continuación:
Kosinski y colaboradores (2013) afirman que con un promedio de 68 likes en Facebook se puede predecir la ideología de una persona (85 por ciento de precisión), su orientación sexual (88 por ciento), su color de piel (95 por ciento), etcétera. Con 300 likes puede predecir su comportamiento mejor que su pareja.
Kosinski, M. et al. (2013). Private traits and attributes are predictable from digital records of human behavior. www.pnas.org/doi/10.1073/pnas.1218772110
¿De verdad creemos que el secreto del voto es garantía de algo si un gobierno desea represaliar a las personas de cierta ideología política? ¿De verdad somos tan ingenuos? Como siempre digo, los Derechos Humanos y la democracia van siempre en el mismo pack. Lo que nos salva de no ser castigados por nuestra ideología, si no coincide con la de nuestro tirano, es la defensa de ese sistema político, no cualquier subterfugio técnico. No lo olvidemos.
Cabe recordar también aquella historia sobre lo sucedido cuando los estadounidenses se retiraron de Afganistán y los datos biométricos cayeron en manos de los talibanes. Esto nos recuerda que esas empresas tecnológicas valoradas en miles de millones de dólares no lo son simplemente por los ingresos que generan, sino también por su potencial para proporcionar cierta información en el futuro si se considera necesario.
Los datos biométricos de los afganos, arma para la venganza talibana


Losantos publica hoy en El Mundo una columna de título "Ninguna rehén ha vuelto viva" donde se señala que ninguna mujer rehén de Hamas en Gaza ha salido con vida. Esto es un bulo que ha sido rotundamente desmentido: en el último intercambio no había mujeres porque estas fueron liberadas en intercambios anteriores.
Cada vez que leo un artículo de César Calderón Avellaneda en The Objective o lo veo comentando encuestas favorables a Ayuso en la COPE, me pregunto cómo hemos normalizado esto. Porque estamos ante un caso de libro de mercenariado político disfrazado de "análisis independiente".
Calderón no es un tránsfuga cualquiera. Este tipo era consultor del PSOE, asesor de Eduardo Madina en las primarias de 2014 y después estratega de Susana Díaz en 2017. Formaba parte del núcleo duro del aparato rubalcabista. Pero cuando Sánchez ganó definitivamente el control del partido, toda esa estructura quedó fuera. Y con "fuera" me refiero a fuera de contratos, fuera de asesorías, fuera del dinero público que mueve un partido en el gobierno.
¿Y qué hizo Calderón? Pues lo que haría cualquier mercenario: buscar otro cliente. Y ese cliente es el PP de Ayuso.
Cuando Sánchez volvió al PSOE en 2017, no solo echó a sus rivales políticos. Barrió todo el ecosistema de consultores, asesores y "expertos" que habían vivido del partido durante años. Gente como Calderón, que había hecho carrera dirigiendo campañas y cobrando por ello, se quedó sin su principal fuente de ingresos.
La dimisión de Rubalcaba en 2014 tras el batacazo en las europeas fue el principio del fin para todo ese entorno. Primero intentaron parar a Sánchez con Madina. Fracasaron. Luego con Susana Díaz. Volvieron a fracasar. Y cuando pierdes dos veces, en política no hay tercera oportunidad.
El episodio de Público en abril de 2020 es revelador, pero no por las razones que él vende. Sí, le echaron por un artículo crítico con Sánchez durante la pandemia. Pero para entonces Calderón ya llevaba años fuera del circuito socialista y buscándose la vida en medios cada vez más escorados a la derecha.
Su fichaje por Vozpópuli no fue casualidad. Y su actual trabajo en The Objective tampoco. Estos medios necesitan "ex-socialistas arrepentidos" que den pátina de credibilidad a sus ataques al PSOE. Y Calderón necesita cobrar. Es un intercambio de servicios.
Lo más sangrante es que Calderón no solo escribe artículos. Aparece en la COPE desvelando encuestas que casualmente siempre benefician a Ayuso y hunden a la oposición. ¿De dónde salen esas encuestas? ¿Quién se las pasa? ¿Cuál es exactamente su relación con el entorno de Miguel Ángel Rodríguez?
Sería interesante que algún periodista investigara si Redlines, su consultora, tiene o ha tenido contratos con la Comunidad de Madrid o con estructuras cercanas al PP. Porque una cosa es escribir artículos de opinión y otra muy distinta es trabajar profesionalmente para quien luego defiendes en los medios sin declararlo.
Calderón no es un caso aislado. Representa un fenómeno más amplio: el de los profesionales de la política que no tienen ideología, solo clientes. Cuando el PSOE les pagaba, eran socialdemócratas. Ahora que les paga (directa o indirectamente) el entorno del PP, son liberales críticos con el sanchismo.
Lo llaman "evolución ideológica". Yo lo llamo por su nombre: prostitución política.
Y lo más sorprendente es que su capacidad de análisis y de clarividencia en "sus" encuestas le llevan a error tras error. Por poner un ejemplo...
No me molesta que alguien cambie de ideas. Yo sin ir más lejos he cambiado de ideas...pero no de bando. Me molesta que alguien cambie de ideas justo cuando pierde su fuente de ingresos y necesita buscar otra. Me molesta que nos vendan como "análisis independiente" lo que es pura revancha personal mezclada con interés económico.
Y en primera persona me molestó que allá por el 2005 hasta el 2008 este indivíduo y sus amigos me acusara de querer "vivir del PSOE".
César Calderón no es un intelectual desencantado con la deriva del PSOE. Es un consultor que perdió a su cliente principal y encontró otro. Así de simple y así de triste.
El tiempo pone siempre las cosas en su sitio y lugar.
Fdo: Enrique Castro Rodríguez aka @enriquefriki
Después de que el médico me comunicase que el cáncer sólo me ofrecía unos 6 meses de mala vida, decidí ahorcarme en un pinar por donde siempre paseaba. Lo último que recuerdo de mi vida humana es una sensación corta pero indescriptiblemente dolorosa, tras la cual todo se volvió negro. Entonces desperté en aquella cabina de cristal. Cuando se abrió, encontré a un ser cuyo aspecto me recordaba a Shiva, la diosa hindú, salvo porque su cara se asemejaba a la de una tarántula sin mandíbulas y levitaba sobre una multitud de tentáculos que sustituían lo que deberían ser sus piernas. Al incorporarme, descubrí que yo era como él. Inmediatamente me habló:
-Bienvenido a tu edad adulta Pqnw. Pronto el ordenador nos dará tus resultados y se te asignará un lugar en nuestra sociedad de acuerdo con tus aptitudes.
-¿Pqnw? ¿Quién soy y dónde estoy?
-La amnesia aún durará un poco. Has estado menos de un sol dentro de la máquina, pero para ti son como 25000 soles. Pronto recordarás quién eres y tu vida real. Aunque los recuerdos de tu avatar te acompañarán siempre.
-Todo lo vivido hasta ahora...¿no era real?
-No. Nuestra civilización lleva miles de soles usando este programa para organizarnos con la máxima eficiencia. Recreamos la vida en un planeta llamado Tierra, extinguido hace millones de soles. Te introducimos en él dándote un avatar aleatorio, y el algoritmo analiza tus pasos a través de tu vida allí. Todo es irreal: la gente con quien interactúas, acontecimientos, guerras, avances tecnológicos, crisis políticas...y está ideado para conocer tus puntos fuertes y débiles a todos los niveles, desde la fortaleza de carácter a la inteligencia, pasando por la ética, el compromiso con tu gente, la capacidad de sufrimiento o la iniciativa. Y...acabo de ver que ya están tus resultados.
-Supongo que seré penalizado por haber abandonado el programa antes de tiempo.
-Al contrario, has mostrado pragmatismo, mente analítica y cierto valor al identificar el momento a partir del cual la vida no podía ofrecerte nada salvo dolor, y atreverte a saltar al vacío. Teniendo en cuenta el resto de tus interacciones durante la prueba, te hemos asignado un puesto de comandante-ingeniero en nuestra colonia espacial L-2381-SQ. Bienvenido al primer día del resto de tu vida tras este breve paréntesis.

El representante de VOX José María Figaredo (con su pinta de repelente niño Vicente) ha asegurado en una charla que la tasa de paro de España está un doscientos por cien por encima de la de la Unión Europea. No con qué datos habrá realizado ese cálculo que equivaldría a decir que la de España sería el triple que la de la Unión Europea. Si nos vamos a los últimos publicados por Eurostat, podemos observar que la tasa de paro de España estaba en agosto en un 10,3%, y la media de la Unión Europea en un 5,9%, luego la tasa de España está un 75% por encima de la de la Unión Europea. Está claramente por encima, pero no en las cifras de Figaredo.

Hay una noticia en portada sobre la persecución a Anna´s archive y otros portales similares, por copiar libros. De hecho, es un tema recurrente y que se suele defender alegando que con esa práctica se hace un enorme daño a los autores y a la gente del mundo de la cultura.
Como autor con una docena de novelas publicadas os puedo asegurar que a los autores, a buena parte de ellos, la piratería de libros nos importa mayormente un carajo, y creo que cada vez menos.
Cuando publicas un libro, te pagan un anticipo ridículo y luego te llevas un porcentaje de cada venta, que suele estar entre el siete y el doce por ciento, dependiendo de quién seas y de la clase de roedor o reptil con el que te encuentres, pero lo más habitual es el diez por ciento.
La cuestión es que desde que se lanza el libro hasta que desaparece de las librerías por la brutal rotación de los editores, los distribuidores y los libreros, sobre todo las grandes superficies, pasan siete u ocho semanas, como mucho. Sí, lo habéis leído bien: tu libro llega a las librerías el 1 de Junio, y a mediados de Julio ya no está y, si alguien lo quiere, tiene que pedirlo expresamente. Las páginas de piratería, por su parte, tardan entre seis y meses y un año en añadir tu libro a su catálogo, salvo que seas un superventas, por lo que la gente puede disponer de él cuando ya NO está en las librerías. Y lo sé por experiencia propia.
Se suele decir que cuando el libro llega a la página pirata, todavía está disponible en las tiendas digitales, como Amazon, FNAC, o Casa del Libro, pero cuando tu obra tiene ya seis meses o un año, las ventas son marginales, y además, muchas veces, los autores no llegamos a ver un duro de esas ventas, porque las que son piratas de veras son las liquidaciones de las editoriales, que escriben más ficción en sus facturas que nosotros en nuestras novelas. En las editoriales hay mucha gente que se dedica a la ficción: los más fecundos son los contables, después van los de márketing, y en tercer lugar estamos los escritores. Por ese orden.
La tercera vía por la que se dice que los libros piratas perjudican a los escritores, es por las ventas que se dejan de producir en plataformas como Kindle, pero aunque casi todos tenemos ahí nuestros libros, lo cierto es que las ventas son tan absolutamente ridículas, y a precios tan reducidos, que a mi, por ejemplo, me produce mayos satisfacción y más beneficio publicitario que alguien se descargue gratis un libro mío y se lo lea, que la posibilidad de que vaya a comprarlo para Ebook y me deje treinta céntimos de ganancia. Y como yo, a otros muchos, muchísimos autores.
Luego, eso sí, está el tema del libro de segunda mano, o las librerías de viejo, que siempre recomiendo: a esas sí que les puede hacer daño, y mucho, que la gente se descargue libros descatalogados. Ahí el daño es real, y no me meto. Pero lo que es a los escritores, os aseguro que el tema, nos importa a muchos una leche. Al menos a nivel económico. Siempre hay gente que te viene con sus rollos éticos de que exige que se le pague por su trabajo y esas cosas. Ética y migajas, todo en uno.
Yo, con la publicidad que me hacen, me doy por pagado. Lo mismo alguien lee gratis un libro mío y luego le da por comprar el siguiente. Mejor eso que pasarte un año escribiendo una novela para que la retiren en seis semanas y no la encuentre ni dios. Opino.
Esto ultimos dias se está hablando del colapso del transporte en la ciudad de Madrid, y se pone como ejemplo la ciudad de Tokio que tiene 35 millones de habitantes aproximadamente, en relación a los cerca de 7 de la Comunidad de Madrid, pero las diferencias de Tokio con Madrid son las que marcan la diferencia entre estas dos ciudades.
Tokio no es una ciudad en el sentido clásico, sino una megalópolis policéntrica compuesta por múltiples núcleos urbanos (Shinjuku, Shibuya, Ikebukuro, Shinagawa, Ueno, etc.), cada uno con su propio tejido de oficinas, comercio, ocio y vivienda. Esto significa que la gente no se concentra toda en un único centro por las mañanas ni vuelve toda al mismo barrio por las tardes.
Madrid, en cambio, es una ciudad fuertemente monocéntrica: el grueso de los empleos cualificados y administrativos se concentra en el área central (Castellana, Azca, Centro, Chamartín) y en ciertos polos del norte y oeste (Las Tablas, Campo de las Naciones, Las Rozas, Pozuelo, Alcobendas, Tres Cantos…). Esto provoca que millones de personas entren y salgan del núcleo cada día, generando cuellos de botella en los mismos corredores (M-30, M-40, A-2, A-6, etc.).
En cuanto al transporte público, Tokio tiene una red ferroviaria metropolitana y suburbana densa y redundante: decenas de operadores (JR, Metro, Toei, líneas privadas como Tokyu o Keio), altísima frecuencia (1–2 min en hora punta), conexiones transversales entre barrios, no solo radiales, posibilidad de hacer trayectos complejos sin pasar por el centro.
En cambio, Madrid tiene una red más pequeña, menos redundante y muy radial, diseñada para traer gente del extrarradio al centro, no para moverse entre zonas periféricas, solo una empresa pública (Metro + Cercanías), con intervalos más largos y saturación en los tramos centrales debido al diseño radial "de todo pasa por el centro" y escasa interconexión entre líneas sin pasar por estaciones de transbordo.
En cuanto al trabajo, en Tokio, los grandes empleadores se reparten entre varios distritos y ciudades satélite (Yokohama, Kawasaki, Saitama, Chiba). Muchas empresas permiten elegir sede o incluso trabajar en sucursales suburbanas y hay políticas públicas de descentralización de oficinas desde hace décadas.
En Madrid, en cambio, la Administración del Estado y la gran empresa privada están hipercentralizadas. Casi todos los ministerios, organismos, multinacionales y sedes bancarias están en el municipio de Madrid y las ciudades del área metropolitana (Getafe, Leganés, Móstoles, Alcalá de Henares, etc.) actúan como dormitorios, no como centros de empleo equilibrados.
Y además, en Tokio el teletrabajo creció tras la pandemia, pero ya había cierta descentralización funcional antes: sucursales, oficinas locales, redes ferroviarias rápidas que conectan suburbios. En España, el teletrabajo se ha frenado y desprestigiado, reforzando el presencialismo en Madrid.
El problema de España es que Madrid concentra mucha infraestructura, servicios, economía y trabajos no solo en Madrid, sino que dentro de Madrid se sigue con la hipercentralizacion en determinadas zonas y puntos calientes. Por eso cuando se compara con Tokio, no es equivalente a pesar de ser Tokio mucho mas grande. Aún así, Tokio también sufre saturación, y sus trenes en hora punta son famosos por la densidad humana. Pero la diferencia es que Tokio está diseñado para sostener esa escala, mientras que Madrid está intentando concentrar en un solo núcleo lo que Tokio distribuye entre varias ciudades del área metropolitana.
Madrid no necesita más metros ni más carriles: necesita menos concentración y más distribución del empleo y los servicios y mayor fomento del teletrabajo 100%.
Recientemente, un grupo de neonazis llegaron a una zona tranquila y pacífica del barrio de Puente de Vallecas para generar altercados y violencia contra varias personas y hasta un gimnasio de la zona. Yo estaba allí, y fui testigo de la violencia gratuita de la banda de neonazis (sí, eran neonazis que no paraban de gritar <<rojo, maricón>> mientras lanzaban palos, piedras y rompían cristales) vinculados a una empresa de desocupación. También fui testigo de la llegada de más de 10 furgones de la Policía Nacional al lugar, pero tuve que irme rápidamente porque tengo una hija de 3 años y lo último que quiero es que por culpa de unos fascistas indeseables tenga que llorar alguna desgracia.
Para que se sepa la realidad que la televisión y los medios de derechas (Telemadrid, Cuatro, Telecinco) jamás llegaron a buscar, trasladando la propaganda de la propia empresa neonazi que les blanquea, quiero haceros llegar este comunicado enviado por el principal afectado del escándalo, el inquilino que desde 2024 viene siendo acosado por un exboxeador y ahora por una banda neonazi de desocupación.

Vecina, vecino, queremos informarte
No te creas todo lo que dice la TV y saca tus propias conclusiones.
La empresa APD Seguridad Iberia, agresora en toda esta historia y en muchas otras, son militantes de formaciones nazis y de ultraderecha que extorsionan, coaccionan, amenazan, usan la violencia e intimidan. El supuesto propietario damnificado, David Andrés, es un empresario valenciano, exboxeador, con una empresa de seguridad. Aunque conoce la situación del inmueble, desde septiembre de 2024 me amenaza con sacarme por la fuerza y aparece cuando le viene en gana, a veces con las cámaras de televisión y otras sin ellas. Ha intentado varias veces entrar por la fuerza, la primera vino acompañado de otro boxeador y dos menores (supuestamente hijos de su amigo) y estuvieron manipulando la puerta con un taladro hasta la llegada de la policía. Esta persona me ha grabado en mi casa sin mi permiso siempre que ha venido <<a hablar>>. Conduce coches de alta gama.
Mentiras que han difundido sin ninguna prueba televisiones sensacionalistas: Cuatro, Telecinco y Telemadrid. Te mostramos los documentos que demuestran que son falsas. Lo que estos periodistas no han hecho.

David Andrés (con la ayuda de las televisiones sensacionalistas) afirma que es propietario de la casa en la que vivo y me amenaza, extorsiona y coacciona para que la abandone, pero no es verdad que sea propietario.
Desde octubre del 2024, semanalmente saco una nota simple en el Registro de la Propiedad. Desde hace años hasta día de hoy, solo figuran tres herederos: los sobrinos de nación Cuesta (ya fellecida). No existe ningún otro documento ni escritura pendiente de anotación. Por tanto, no es cierto que sea el propietario.
Hemos visto y comprobado las escrituras que mostró ante el juzgado, pero ni siquiera coincide el número de la vivienda. Simplemente son falsas. Dice que se la han vendido por 20.000 €, pero todo el mundo sabe que ese precio es imposible en Madrid. No sabemos si ha comprado sin escrituras o se trata de otro chanchullo, pero no hay duda de que es ilegal. Si de verdad fuera dueño, lo reclamaría judicialmente, no por medio de amenazas y coacción.
A día de hoy, no hay ninguna causa abierta judicialmente que afecte a esta casa. No existe denuncia, no ha habido juicio, ninguna reclamación. Así que no existe ninguna orden de desahucio.
Hasta el momento, lo único cierto es que el Juzgado de Instrucción n.º 34 ha condenado a este sujeto como autor de delito de coacciones y me ha absuelto a mí, algo que quedó demostrado judicialmente.

La Cuatro. Telecinco y Telemadrid me atacan e insultan con el único objetivo de montar su show y beneficiarse del espectáculo. Lo suyo es desinformar y no documentarse Con la verdad, como sería su deber. Sin ninguna base, me han acusado de ser:
Vecinas, vecinos, estoy a vuestra disposición para cualquier aclaración que necesitéis, porque sé que la razón está de mi lado. No quiero vivir con miedo a unos matones fascistas que buscan especular con este terreno. Y sobre todo quiero daros las gracias a todas las vecinas y vecinos que me estáis apoyando y os posicionáis. Gracias también al Club Deportivo La Fábrika por todo su apoyo. Si intentan criminalizarlos, es porque quieren proteger nuestro barrio.
Denunciamos el trato sesgado y vejatorio que estamos recibiendo por parte de la policía y la televisión, y el apoyo que dan a estos matones, fascistas y nazis.
Vecina, vecino, no les hagas el juego. Únete y lucha. ¡Fuera fascistas de nuestros barrios!



Como veis, hace mucho tiempo que no escribo sobre la guerra de Ucrania, pero no por eso he dejado de seguirla. Lo mismo sucede en la mayor parte de los medios de comunicación: es curioso que en un momento de sobreinformación como este, no se comente prácticamente nada sobre la evolución del frente, pero ya nos tienen acostumbrados a que la palabra guerra se represente por asépticas fotografías de hormigón aplastado, evitando mostrar el verdadero trauma de los cuerpos rotos.
Al contrario de lo que sucedía, y aún sucede en Gaza, donde uno de los ejércitos más potentes del mundo arramblaba con todo frente a una milicia prácticamehnte en alpargatas, en Ucrania SI tenemos una guerra. Allí, en los últimos meses, la situación se ha deteriorado gravemente para los defensores ucranianos en algunos puntos críticos del frente. La verdad es que se ha deteriorado en casi todas partes, pero hay que señalar dos puntos principales: el frente de Porkrovk y el frehte de Kupiansk.
Este es el mapa del primero, sacado, como siempre de @Suriyakmps

Como puede verse, los rusos han conquistado prácticamente toda la ciudad de Pokrovsk, última defensa importante en el Donbás, de las que venían reforzándose desde hace 11 años, y han sometido a lo que es casi un cerco a todas las tropas defensoras de Myrnograd y sus aledaños. Como viene siendo habitual, los rusos no van a cerrar el cerco para atrapar dentro a los ucranianos, sino que los van a hacer huir por ese estrecho pasillo, abandonando todo el material pesado a sus espaldas, y practicando el tiro al pichón con ellos mientras salen. Los cercos completos han demostrado ser mucho más costosos para el atacante porque los defensores, desesperados, resisten hasta el último hombre, causando grandes bajas a los atacantes. Por este sistema del cuasi-cerco, los defensores conservan la esperanza de salir, lo intentan, y algunos lo consiguen, pero abandonan la idea de defender con uñas y dientes sus posiciones.
En cuato a Kupiansk, recobrada por los ucranianos en la brillante contraofensiva de 2022, la situación es más difícil de ver en el mapa, pero igualmente crítica:

Aquí, entre los dos bordes rusos, en naranja, parece que hay un amplísimo espacio, pero se trata de un río, el Oskil, muy difícil de cruzar y sobre el que sólo hay dos puentes, destruidos, en Kupiansk-Vuzlovyi. Todas las tropas ucranianas que han quedado al Este de ese río, dependen de esas dos vías casi imposibles para su aprovisionamiento y su huida.
Tanto en el primer caso como en el segundo, los ucranianos se verán obligados en pocas semanas a evacuar estos puntos. La situación en el recodo del río Donets, junto a Siversk, no es mucho mejor, por lo que toda la defensa de Sloviansk y Kramatorsk, últimas grandes ciudades del Donbás, depende ahora de la defensa de Izium, un ciudad clave que también rcuperaron los ucranianos en Septiembre de 2022.
A mi entender, quedan varios meses aún para que los rusos puedan alcanzar Izium, pero cuando lo hagan, el Donbás entero estará condenado sin remedio.
Entre tanto, parece probable que las operaciones rusas continúen en el sur, cerca de Giuliapole, y avancen por las llanuras, mucho más difíciles de defender, una vez haya caído Pokrovsk. Sin embargo, al contrario de lo que dicen mucho analistas, no me parece probable que asalten Konstanyvka en fechas próximas, porque semejante esfuerzo no tendría sentido operativo si se pretende, como parace, una vez más, generar un semicerco en torono a las dos grandes urbes de Sloviansk y Kramatorsk.
Con esta situación en el frente, este invierno tendremos indicios de si los rusos pretenden quedarse simplemente con el Donbás o avanzan hacia otras regiones. Yo apostaría por lo segundo, pero tampoco tengo grandes argumentos para ello: se trata de una simple opinión personal.
Así las cosas, no es de extrañar que Putin dé largas a todos los intentos por alcanzar un alto al fuego que sólo serviría para dar aire a los ucranianos, muy asfixiados enj el frente. Esa es la lógica de la guerra.
Hola, amigos y amigas, estoy muy triste. Mi trabajo de aporreateclas parece que no sirve para nada en este mundo actual, si las editoriales son mezquinas, si las productoras viven de las ayudas estatales y si todo este mundo vive de segundos publicados en tik-tok... pues todo lo que he aprendido a mis canas sirve de poco. De nada. He trabajo en publicidad muchos años, he trabajado escribiendo textos para iletrados presentadores de televisión, he escrito entrevistas para que otros iletrados fingieran saber mucho, he hecho casi de todo, pero en estos años (muchas canas) ando triste. Supongo que con 70 años me podré jubilar, pero... ¿y todo lo que he hecho en este mundillo? Para nada importa. Comencé trabajando en el mundo del cómic, hasta que quebró en los 80 y aquí estoy.
Siento mucha pena, no sólo por mí (que sí) sino por el futuro. Y no, soy de esos que no figuran en los créditos, os recuerdo que existe gente que escribe, de nuevo nuevos diálogos a las series que véis, lo siento, a veces soy yo, y muchas veces no hay arreglo, no figuro en ninguna parte (ni quiero) pero me siento triste de la evolución de todo el audiovisual no sólo español, sino europeo.
(Artículo del Patriotic Millonaires Research Center, 2023
"Patriotic Millionaires es una agrupación de estadounidenses acaudalados que luchan contra la concentración desestabilizadora de riqueza y poder en los Estados Unidos. Nuestros miembros utilizan su influencia y sus voces únicas para promover una economía dinámica y equitativa, basada en un sistema tributario justo, un salario digno para todos los trabajadores estadounidenses y el acceso igualitario al poder político.")
En el período previo a las elecciones presidenciales de 1992, James Carville acuñó la famosa frase «Es la economía, estúpido». Pronto se convirtió en el lema de la exitosa campaña de Bill Clinton.
Eso fue hace treinta años. Con lo mucho que ha cambiado nuestro país desde entonces, nos gustaría sugerir que se actualice el famoso estribillo a «Es la desigualdad, estúpido».
La desigualdad económica se ha disparado en Estados Unidos desde que Bill Clinton asumió el cargo. (Comenzó a aumentar después de que el predecesor de Clinton, Ronald Reagan, entrara en escena, pero el mandato de Clinton fue testigo de la continuación de esta tendencia). Hoy en día, hay 735 multimillonarios en Estados Unidos, tres de los cuales —Elon Musk, Larry Ellison y Jeff Bezos— poseen una riqueza de más de un millón de veces superior (!!) a la riqueza media de los hogares estadounidenses. Mientras tanto, casi el 60% de los estadounidenses viven al día, un tercio de los trabajadores ganan menos de 15 dólares la hora y aproximadamente 38 millones de estadounidenses viven por debajo del umbral de la pobreza.
No es casualidad que, a medida que los ricos se han hecho más ricos, cada vez más estadounidenses hayan tenido dificultades para llegar a fin de mes. Todas las pruebas disponibles demuestran que la pobreza y la desigualdad están íntimamente relacionadas. Un informe reciente reveló que Estados Unidos, uno de los países con mayor nivel de desigualdad entre los países desarrollados, tiene más pobreza intergeneracional que varios países similares. Además, la alta desigualdad perjudica la movilidad social y el crecimiento del PIB, dos mecanismos clave que permiten a las personas salir de la pobreza. Existe una relación clara e innegable entre el número de personas que viven en la pobreza y la magnitud de la brecha entre ricos y pobres, y los responsables políticos serían insensatos si no lo vieran.
Sin embargo, hay otras razones, además de la pobreza, por las que debemos preocuparnos por la desigualdad extrema. Una de las más importantes tiene que ver con la forma en que la concentración extrema de la riqueza en un pequeño grupo de personas desestabiliza nuestra democracia. A medida que los ricos se han enriquecido en las últimas cuatro décadas, han contribuido más a las campañas políticas. (Esto es especialmente cierto desde la sentencia del Tribunal Supremo de 2010 en el caso Citizens United, que abrió las compuertas al gasto ilimitado de los Super PAC). Han utilizado su riqueza para impulsar políticas en la dirección que les conviene, lo que ha creado un círculo vicioso en el que la desigualdad económica produce desigualdad política, lo que a su vez genera más desigualdad económica.
En ningún lugar esto es más evidente que en el código tributario. Nuestro código tributario fue en su día impresionantemente progresista. Durante la Segunda Guerra Mundial, el tipo impositivo marginal máximo del impuesto federal sobre la renta alcanzó el 94 % y se mantuvo por encima del 90 % hasta 1964, abarcando la totalidad de la década de 1950, considerada por muchos como la «edad de oro» económica de los Estados Unidos. Nuestro impuesto sobre el patrimonio también fue en su día muy sólido —tenía un tipo máximo del 77 % entre 1941 y 1976— y era eficaz para reducir las grandes fortunas.
Con el paso del tiempo, nuestro código tributario se ha vuelto mucho menos progresivo. Los multimillonarios pagan tipos impositivos mucho más bajos que los estadounidenses medios y, en ocasiones, se libran de pagar cualquier impuesto federal sobre la renta. El impuesto sobre el patrimonio se ha llenado de lagunas y exenciones tan complicadas que, en esencia, se ha convertido en un impuesto «opcional» para los ricos. Las ligas deportivas multimillonarias, como el PGA Tour (que recientemente se ha fusionado con LIV Golf, una liga de golf respaldada por Arabia Saudí, un país conocido por sus abusos contra los derechos humanos), no tienen ninguna obligación fiscal.
Hace más de una década lanzamos nuestra campaña para poner orden en este caos. Queremos que los gobiernos graven adecuadamente a las personas ricas como nosotros, tal y como hacían en el pasado, para contener la desigualdad, NO solo para recaudar ingresos. Con el paso del tiempo, la idea generalizada de que el código fiscal desempeña un papel importante en la distribución de la riqueza en Estados Unidos se ha desvanecido, sustituida por una visión miope y limitada de los impuestos como meros generadores de ingresos.
No creemos que sea necesario aumentar los impuestos a los ricos para recaudar ingresos con los que financiar las medidas que el gobierno quiere llevar a cabo. Creemos que es necesario aumentar los impuestos a los ricos para reducir la desigualdad. La desigualdad, como ya hemos expuesto, es perjudicial para nuestra economía, para los pobres y para nuestra democracia. Eliminar la desigualdad a través del código tributario no debería ser una preocupación secundaria a la hora de buscar ingresos, sino nuestra prioridad absoluta.
Reconocemos que algunos políticos que promueven aumentos de impuestos a los ricos podrían considerar políticamente conveniente vincularlos directamente con programas gubernamentales nuevos o ampliados. La mayoría de los legisladores, incluso aquellos que quieren gravar a los ricos, no están del todo seguros de que el público comprenda cómo sus vidas mejorarán directamente al gravar a los ricos, y creen que deben convencerlos de que apoyen los aumentos de impuestos ofreciéndoles otros programas.
No creemos que eso sea necesario. El problema al que nos enfrentamos NO es la falta de apoyo a nuestra visión: la mayoría de los estadounidenses están de acuerdo en que la desigualdad es un problema y en que los ricos y las empresas no pagan lo que deben en impuestos. El pueblo estadounidense apoya de forma abrumadora el aumento de los impuestos a los ricos; de hecho, cuando se propuso la agenda original de Biden como la Ley Build Back Better, una de las partes más populares del proyecto de ley era, como habrán adivinado, gravar a los ricos.
En cambio, nuestro problema para avanzar en nuestra agenda es la captura política por parte de los ricos. Tal y como están las cosas ahora mismo en Estados Unidos, los funcionarios electos responden a los intereses y preferencias de los ricos, no a los de sus electores ni a los de los trabajadores de todo el país. Algo tiene que cambiar, y creemos que para acabar con esta captura política y luchar contra la desigualdad, necesitamos que los trabajadores más afectados por la desigualdad se unan y exijan un cambio. Con ese fin, recientemente hemos puesto en marcha una nueva iniciativa, el Great Economy Project, en Whiteville, Carolina del Norte. Estamos llevando nuestro mensaje sobre la necesidad de luchar contra la desigualdad y gravar a los ricos a las pequeñas ciudades de Estados Unidos y proporcionando a la gente las herramientas que necesitan para romper el círculo vicioso de la desigualdad económica y política en Estados Unidos.
Todas las personas que hemos conocido en Whiteville —madres solteras, jubilados, trabajadores con salario mínimo— han vivido la desigualdad en Estados Unidos. Por su propia experiencia, comprenden perfectamente que la economía no funciona para la mayoría, sino que solo sirve para desviar la riqueza y los ingresos hacia unos pocos. Y ahora, gracias a nuestro programa, muchos de ellos se sienten impulsados a hacer algo al respecto. Para cerrar la brecha entre los ricos y el resto y alejar nuestra democracia del abismo del autoritarismo, todos debemos unirnos para exigir un cambio. Creemos que nuestro trabajo en Whiteville es un comienzo.
Este es el lema de Patriotic Millionaires: si te preocupa la lucha contra la pobreza y te preocupa salvar la democracia, entonces soluciona la desigualdad, imbécil.
menéame