MAI-DxO funciona como un grupo de cinco médicos, cada uno encargado de una tarea: elaborar hipótesis, confrontarlas, pedir tests, calcular los costes y realizar un control de calidad.
Así, como si fuera el Dr. House, la IA va indagando en el problema del paciente, probando y eliminando hipótesis, hasta llegar a una conclusión lógica.
El resultado es que MAI-DxO, funcionando a plena capacidad, acertó el diagnóstico del 85,5% de los casos.