Érase una vez un “bar” con el rótulo en naranja vivo y con el logotipo de un elefante sentado. Dentro, a un lado de la barra, mezclados y agazapados, encontrareis a los palabristas, los malabaristas de las palabras. Un poco más allá, sentados en una mesa, a los “ytúmás”, tribu muy consolidada que dispara con enlace rápido; algunos versados en idiomas los llaman los “guotebautistas”. En otro lado de la barra, muy cerca de la máquina expendedora de carnets, están los salvapatrias …