Gemma Barker, una chica inglesa de 19 años llevaba una doble vida y se disfrazaba de varón para salir con sus propias amigas, por las que se sentía atraída sexualmente. Solamente cuando fue arrestada disfrazada de uno de sus personajes, Aaron Lampard, y le quitaron la ropa, la policía descubrió su verdadera identidad. Para sostener encuentros sexuales se colocaba un condón en un objeto que llevaba en forma de pene, sabiendo que de otro modo no habrían consentido tener intimidad con ella.
