#4 Y de paso incluir en la investigación el fraude en el concurso por el hecho de que 4 clientes consiguieron validar el premio antes de la apertura, cosa en principio imposible.
#4 por lo que tengo entendido ya subió hace 50 años. Temeridad seria empezar a hacer picos de esa altura con 80 años pero con 50 años de experiencia la cosa cambia y tonto no es, sabe que en cualquier momento le da un chungo y sabe que no es lo mismo que le de en casa que alli y lo acepta. Ojala yo llegara asi a su edad.
#60#45 a mi personalmente me ha llamado la atencion la vileza, la maldad, pura maldad del acto. Generalmente hay un movil, un motivo para el asesinato, robo, violacion,dinero, politica, celos....aqui ni siquiera mediaron palabra, no la robo, ni la agredio sexualemente. Nada.
Es ese acto tan aleatorio lo que da miedo, porque eso nos puede pasar a cualquiera, estar en el momento menos indicado en el lugar menos adecuado. La diferencia entre la vida y la muerte en este caso es puro azar. Y eso, da miedo. Para mi es el principal motivo porque el que este caso llama la atencion, nos puede pasar a cualquiera.
#91 Tienes razón, pero aquí el problema es que este efecto ha sido reportado por las Agencias Europea y Española del Medicamento ahora en 2025, y si ahora sabiendo esto te quedas ciego, las reclamaciones a la perra del maestro armero.....
#56 Las comisiones también se regularon. Para una cosa buena que hizo el PP... Hoy en día las comisiones son ridículas y el establecimiento que no acepta pago con tarjeta es que tiene pocas ganas de vender. Más allá de que los pagos con tarjeta sigifican dar el dinero al banco, que ahí puede haber condicionantes éticos que sí entiendo.
#54 Perdona pero no. En españa para más de 30 Euros no pueden exigirte efectivo. Tiene que ofrecerte alguna alternativa: Tarjeta, Bizum, transferencia, etc...
Según el Real Decreto-ley 19/2018 del 23 de noviembre, los trabajadores por cuenta propia pueden solicitar el pago en efectivo hasta la cantidad de 30 euros. Si supera este límite, el negocio estaría obligado a ofrecer al cliente cualquier otro método de pago, bien sea mediante tarjeta, transferencia bancaria o servicio de aplicaciones móviles.