Las autoridades iraníes han detenido a cientos de personas y ejecutado a decenas en una ola de represión tras la guerra de 12 días con Israel, según afirman activistas, que acusan a la República Islámica de utilizar el miedo para compensar las debilidades reveladas por el conflicto. Los activistas han sido detenidos en la calle o en sus casas, se han acelerado las ejecuciones, se ha trasladado a los presos a lugares desconocidos y también se ha atacado a las minorías, según grupos de derechos humanos. (Trad. en comentarios)