Disponer de tejidos humanos contribuye de manera invaluable al avance de la investigación en salud, incluyendo investigación biológica básica, toxicológica, farmacológica, etc. El cuerpo de los humanos y el de otros animales son similares en lo general, pero diferentes en muchísimos aspectos específicos. Consecuentemente, la investigación en células y tejidos animales no siempre es aplicable a los seres humanos.