#6 Un error con el "cuentavueltas".
65535 ... 216 ... Cómo odio ese puto número. Variables/campos mal dimensionadas o antiguos, errores de volcado en hojas de cálculo...
#7 Sí, sí que pasa. Que te están dando por el cacas cada vez que te conectas, o te mandan correos, sms ... Joder, eso debiera ser tipificado como spam, si no acoso documental
#4 Hasta un asesino despiadado puede tener ciertos remordimientos. Estas "personas" eran auténticos psicópatas, de los de hacer un estudio aparte. Descubrir eso ha de ser traumático.
#13 Sí, yo me he encontrado algún que otro "yuyu" y tener que revertir manualmente actualizaciones de windows, Office... (de esta no, de momento )
Y si, también me ha tocado restaurar una máquina debian por una actualización "corrupta", o que me tocó, sin más.
De todo hay en IT, pero como dice #38 el usuario empresarial suele ir por detrás en actualizaciones (al menos una semana), y el usuario "home" solo quiere que la lavadora lave.
En fin, la pelea de siempre Windows VS. Mac vs. Linux (con o sin gnu )
PS. El negativo es por insultar a personas que están arriesgando su vida para que tú desde tu puta casa tranquilito y seguro puedas escribir chorradas en tu teclado.
#2 * Incendios provocados para reclamar la presencia de policía o Guardia Civil o llamar la atención de autoridades sobre un problema (zonas con prostitución, drogadicción, etc)
1 0,05%
#157 El problema empezó con el uso de ese diminutivo "sudaca" como despectivo, que ahora provoca que el propio término "sudamericano" suene mal, cuando creo que es lo mas correcto, bien dicho como dices.
#119 Ante podías decir sudamericanos, que engloba a todo el sur del continente independientemente de su historia, pero ahora lo consideran un término "despectivo".
#19 Ya, pero mientras peleas en un juicio sigues trabajando sin cobrar, y al final o aguantas la respiración o pides la cuenta te vas con nada (ni paro ni leches).
Mal ejemplo el tema laboral (y la mayoría) a causa de la lentitud judicial y burocrática en este país.
#47 Yo con 8 meses recuerdo que mis padres hablaban lo del bautizo, mi nombre, iniciarme en la fé cristiana... Y ya me di cuenta que no estaba muy claro eso de mojarme el cogote para que un tío me acepte en su grupo. Sonaba más bien a excusa para pegarse una comilona a costa de mis padres.
Intenté hablar con ellos para hacerles razonar, pero solo me salían babas y gorgoritos. Y encima ellos encantados. Mira cómo ríe el niño. ¿Ves? Le gusta la idea.