Siete años después de haber prometido la abolición, el PSOE reemprende la cruzada con escasa credibilidad y con el consenso hipócrita del PP. El proyecto de abolición de la prostitución es una pieza de atrezzo. Una escenografía. Una promesa que se repite cada año como los propósitos de Nochevieja: dejar de fumar, hacer deporte, salvar a las putas. Pero pasa el tiempo, cambian las ministras, se renuevan los eufemismos, y la ley sigue sin aprobarse. Siete años lleva el PSOE amagando con erradicar el oficio.
|
etiquetas: abolición , prostitución
Supongo que si en este país todas las personas tuvieran acceso a un empleo de 1.500€/mes este debate no existiría, porque quien se prostituya es porque prefiere ganar varias veces eso aun teniendo alternativas para no hacerlo y entonces estaría claro que es una profesión más a regularizar.
Ánimo cuando llegue.
No. En realidad no.
elpais.com/diario/2008/07/20/sociedad/1216504801_850215.html
(quien dice RBU dice un trabajo moderadamente cómodo con esa retribución)