Sin duda, una de las peores cosas que llevo de mis compatriotas es verlos con el brazo en alto, cantando el cara al sol, con el trapito del buitre, el yugo y las flechas ondeando al viento a sus espaldas. Dicen sentirse orgullosos de ser españoles, y a mi me da vergüenza ajena que lo crean, por no hablar del asco que siento sabiendo que son seres humanos y resulta que yo también lo soy. Luego alguien se extraña de reivindicaciones como las del Proyecto Gran Simio, porque nadie me negará que si estos cenutrios, "patriotas" y humanos, los tienen