Almeida, un churrinano pendenciero con el rencor del canijo. Un tipejo grimoso que ha renunciado a los valores humanos y prefiere ser adulado como ferviente parásito miserable. Siempre a la sombra del poder vicario demostrará con devoción su servilismo atroz para destacar entre otros peleles.
Necesita un ecosistema muy específico para sobrevivir y clonarse, pero este siglo ha encontrado una ciénaga social de baba de subnormal en la que disfruta de condiciones propicias.
Hostia, la de rojo de la foto estaba conmigo en la clase en el instituto. Emma López, hija de padres gallegos con padre militar destinado a la base naval de Rota.
Necesita un ecosistema muy específico para sobrevivir y clonarse, pero este siglo ha encontrado una ciénaga social de baba de subnormal en la que disfruta de condiciones propicias.
Claro que la reponen tantas veces....
Se ve que gusta