El equipo descubrió que cada participante contrajo de tres a 17 infecciones por coronavirus dentro del período de estudio, y las reinfecciones ocurrieron cada seis meses a ocho años y nueve meses. Sin embargo, la mayoría de las veces, la reinfección de un coronavirus en particular ocurrió aproximadamente un año después de la infección anterior.
"Demostramos que las reinfecciones por infección natural ocurren para los cuatro coronavirus estacionales, lo que sugiere que es una característica común para todos los coronavirus humanos"
Comentarios
Un 1% de mortalidad anual haría que el coronavirus fuese la primera causa de muerte por encima del cáncer y los problemas cardiacos juntos.
#5 gracias por los ánimos...aunque es realista
A vacunarse cada 6 meses, toda la humanidad. Voy a comprar acciones de empresas creadoras de vacunas.
#1 Date prisa antes de arruinarte con la crisis que esto va a traer.
Joder, yo creo que este siglo no se jubilará casi nadie, habremos muerto antes.
#7 algo es algo.
El que acabe este 2020 sin depresión que me contacte y me explique cómo ha hecho...
#2 Sencillo. Hay tipos que solo quieren ver el mundo arder. Soy uno de ellos.
#3 Yo no quiero ver el fin del mundo, pero si viene el fin del mundo... ¡quiero verlo!
#3 Eso es que vives sin amor. (Lo digo desde la borrachera que tengo ahora mismo).
#2 A mí me consuela (poco) pensar que, a pesar de todo, tiene una mortalidad "baja". Sinceramente pensaba que la próxima pandemia que hubiera se llevaba por delante a la mitad, y me alegro de equivocarme.
#4 Yo también era de ésos. De los que pensaban que el mundo merecía una lluvia de fuego que lo hiciera resurgir de sus cenizas, pero sinceramente, creo que por culpa de que la mayoría de seres humanos son idiotas, el resto no merece un destino tan fatal. En fin, son las cosas que uno termina sintiendo cuando crece escuchando Nirvana por sus letras, más que por otra cosa.
Eso sí, coincido contigo: llevo lustros creyendo que lo mejor era una gran mierda que nos llevara a todos "con las patas por delante" (como solía decir mi madre), pero hoy día compruebo en mis carnes serranas que hay que tener mucho cuidado con lo que se desea. Lo que es perfecto para un momento, es desastroso para otro...