Tras casi un siglo en Nueva York, ven como su imperio cae día a día. Las que fueron las organizaciones criminales más perseguidas por el FBI ven relegado su poder a otras mafias, por una asfixiante presión policial o por vivir en una sociedad diferente.
En realidad, a pesar de su declive siguen siendo la organización criminal más poderosa en Estados Unidos porque fueron los que mejor han sabido tejer alianzas con políticos, jueces y fiscales. Sin ir más lejos, el alcalde de las Vegas fue el abogado defensor de Anthony Spilogtro, (el ganster en el que se basa el personaje de Joe Pesci en Casino). Las mafias italoamericanas tienen un poder de influencia que no tiene por ejemplo la rusa y sus dominios llegan desde Sudamérica (principalmente Brasil) hasta Canadá (familia Rizzuto). En los 80 manejaron casi todo el mercado mundial de la heroína, de hecho son los responsables de toda la heroína que entró en España en esa década que venía de Asia y se refinaba en Sicilia. Giulio Andreoti fue uno de los principales artífices de su declive (primero como fiscal y luego como alcalde de nueva York) pero como bien dice el artículo tras el 11S la mayoría de los efectivos dedicados al crimen organizado fueron pasados a la lucha antiterrorista y está gente tienen un poder de regeneración tremendo, principalmente por eso, por su capacidad para tejer alianzas institucionales de las que carecen otros grupos criminales.
#1 Corrijo, quien lucho contra la mafia no fue Giulio Andreotti (este fue primer ministro de Italia y además tenía fuertes vínculos con Cosa Nostra) sino Rudolph Giuliani.
#3 Una escena muy buena y muy bien traída. Un ejemplo, en los 70 y 80 controlaban las licencias de construcción en la ciudad de nueva York, sin ir más lejos, Donald Trump no ponía un solo ladrillo en esa ciudad sin contar con el permiso de la familia Gambino.
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En realidad, a pesar de su declive siguen siendo la organización criminal más poderosa en Estados Unidos porque fueron los que mejor han sabido tejer alianzas con políticos, jueces y fiscales. Sin ir más lejos, el alcalde de las Vegas fue el abogado defensor de Anthony Spilogtro, (el ganster en el que se basa el personaje de Joe Pesci en Casino). Las mafias italoamericanas tienen un poder de influencia que no tiene por ejemplo la rusa y sus dominios llegan desde Sudamérica (principalmente Brasil) hasta Canadá (familia Rizzuto). En los 80 manejaron casi todo el mercado mundial de la heroína, de hecho son los responsables de toda la heroína que entró en España en esa década que venía de Asia y se refinaba en Sicilia. Giulio Andreoti fue uno de los principales artífices de su declive (primero como fiscal y luego como alcalde de nueva York) pero como bien dice el artículo tras el 11S la mayoría de los efectivos dedicados al crimen organizado fueron pasados a la lucha antiterrorista y está gente tienen un poder de regeneración tremendo, principalmente por eso, por su capacidad para tejer alianzas institucionales de las que carecen otros grupos criminales.
#1 Corrijo, quien lucho contra la mafia no fue Giulio Andreotti (este fue primer ministro de Italia y además tenía fuertes vínculos con Cosa Nostra) sino Rudolph Giuliani.
#1 Ya lo decía Michael Corleone en El Padrino 2: Senador, los dos formamos parte de la misma hipocresía.
#3 Una escena muy buena y muy bien traída. Un ejemplo, en los 70 y 80 controlaban las licencias de construcción en la ciudad de nueva York, sin ir más lejos, Donald Trump no ponía un solo ladrillo en esa ciudad sin contar con el permiso de la familia Gambino.
Corleone, Barzini, Tattaglia, Cuneo y Stracci.
Cómo defendían sus últimos almacenes los muy cabrones.
¿Ocaso? Querrán decir que cada vez se ocultan mejor.
Aquí, justo al contrario, cada vez se ocultan peor.