Hace 11 años | Por Soapy_Henderson a blogs.elpais.com
Publicado hace 11 años por Soapy_Henderson a blogs.elpais.com

Hay ocasiones en la vida en las que es inevitable necesitar un coche. Para realizar un viaje; una mudanza (aunque algunos las hagan a pedales) o para acudir a un trabajo a 30 kilómetros de tu casa. Pero eso no significa que haya que poseer uno ni que en esos casos haya que recurrir desesperadamente a un amigo, al coche de un familiar o al alquiler tradicional...

Comentarios

perrico

Pues que hagan algo para solucionarlo, porque el autobús, que ni me deja cerca del trabajo ni tiene la flexibilidad horaria que se adapta bien al mismo, cuesta más de lo que me sale la gasolina.
Por otra parte, hay veces que necesitas el coche de forma inmediata, por ejemplo, no tenías pensado usarlo para un recorrido asumible a pié y se pone a diluviar o te sale un plan de última hora que se vuelve imposible sin un desplazamiento flexible.

Me parece un buen concepto, pero no es válido para todo el mundo.

Mientras tanto, sería de desear que se compren coches dimensionados a las necesidades, que un Porche Cayenne para ir al Mercadona es excesivo.

r

Lo peor es que cuando tienes un coche necesitas gasolina, el seguro obligatorio, pagar impuestos, reparaciones, cambiar aceite y filtros, cambiar ruedas...

gideon_k

La idea es fantástica. Pero suma a la ecuación un crío, todo lo que eso conlleva de trastos, y las actuales rutas de autobuses para quien no vive en núcleo urbano y el modelo se derrumba.

Eso a pesar de saber que un coche es un pozo sin fondo de gastos, y hablo de un utilitario normalito, sin meterme en los sobrevalorados SUV y Monovolúmenes para familias con un solo hijo.