Siempre se ha sospechado que la relación entre el Estado y la cultura está basada en el sentimiento de culpa. En una ecuación tan sencilla como ésta: como los mecanismos de educación y de organización social desarrollados por los poderes políticos han sido incapaces de dar lugar a una sociedad poblada por ciudadanos que hagan, pongamos por ejemplo, vivir a Velázquez o Goya de su talento, el Gobierno decidió compensar ese vacío y ocuparse de la cultura.
|
etiquetas: ministerio , cultura , culpa , politica , subvencion