Betelgeuse es una estrella que se aproxima al final de su vida. Es famosa entre los astrónomos aficionados no sólo por su tamaño y brillo, sino también porque es parte de Orión, una brillante constelación de invierno en el hemisferio norte.
#1 En realidad es una estrella conocida desde hace siglos y su nombre viene de una muy mala traducción al latín durante la edad media de su nombre arábigo.
#7 Vamos a ver, que si, que andamos todos (y todo) inexorablemente hacia el fin de nuestras vidas o existencias.
Pero en las escalas temporales en que nos movemos al hablar de esto, un millón de años es un suspiro. Comparándolo con la vida esperable de nuestro Sol (y ya no digamos una estrella enana de misma edad que Betelgeuse), y aplicándolo a un símil humano, sería como comparar la vida que le queda a un enfermo terminal recibiendo la extremaunción con la de Matusalén contando desde el espermatozoide que engendró a su bisabuelo.
Comentarios
¿Y si decimos su nombre tres veces, arreglamos algo...?
#1 Calla, calla, a ver si se va a aparecer de golpe y engulle la Tierra y de paso a medio sistema solar...
#1 Bitelchús, Bitelchús, Bitelchús
Miedo me da decirlo.
#8 Bueno, sería peor decir cinco veces Candyman...
#1 En realidad es una estrella conocida desde hace siglos y su nombre viene de una muy mala traducción al latín durante la edad media de su nombre arábigo.
Vaya traducción más horrible... eventual en inglés y en español tienen significados distintos.
#3 Venía a decir lo mismo... Si aún no es supernova no puede ser eventual.
Lo correcto hubiera sido "la futura supernova".
¿Supernova eventual? Espero que al menos la tengan con contrato y SS...
#4 Los nazis siempre queréis meter a las SS en todo.
#5
#5 https://es.wikipedia.org/wiki/Ley_de_Godwin
"que se aproxima al final de su vida", como todas, se llama flecha del tiempo.
"...dentro de un millón de años"
#7 Vamos a ver, que si, que andamos todos (y todo) inexorablemente hacia el fin de nuestras vidas o existencias.
Pero en las escalas temporales en que nos movemos al hablar de esto, un millón de años es un suspiro. Comparándolo con la vida esperable de nuestro Sol (y ya no digamos una estrella enana de misma edad que Betelgeuse), y aplicándolo a un símil humano, sería como comparar la vida que le queda a un enfermo terminal recibiendo la extremaunción con la de Matusalén contando desde el espermatozoide que engendró a su bisabuelo.