Los caseros tienen la propiedad pero no la posesión de sus inmuebles. No entender esta sutil diferencia puede salir caro. Hace dos semanas, una mujer de 47 años se personó en un piso que su madre tenía alquilado para exigir a la persona que estaba viviendo en él que pagara el alquiler. Entró en la casa y se negó a abandonar la entrada hasta que el inquilino solventase su deuda. El presunto deudor llamó a la policía y la acusó de allanamiento de morada. La casera ‘justiciera’ fue condenada a seis meses de cárcel.
|
etiquetas: alquiler