Los fuegos artificiales de anoche en Pamplona duraron solo cinco minutos. Un fallo en la máquina de disparo provocó que se lanzasen todos a la vez simulando ser más una traca final que un espectáculo pirotécnico digno de un concurso como el de Sanfermines. El ordenador que regula la máquina de lanzamiento de los fuegos tenía la orden de disparar todos los cartuchos y cuando los miembros del equipo pirotécnico consiguieron detener dicha orden, solo quedaba el 10% de los cohetes sin lanzar.
|
etiquetas: pamplona , sanfermines , fuegos , fallo
Como siempre, culpa del informático
Supongo que no querrán que se vea lo que se tarda en quemar la pasta, literalmente.