Con Franco cerraban las joyerías, con sus "descendientes" cerrarán las inmobiliarias. (Ah, no, que aquí, como todos sus caprichos, se los pagamos nosotros).
Cuando jubilen a Netanyahu, con honores o haciendo algún paripé de autocrítica ¿Israel ya será bueno? Porque con las atrocidades cometidas yo ni en 100 vidas les podré perdonar.
¿Y si nos copiamos cosas buenas? ¿Pueden comprar vivienda los extranjeros allí? ¿Pueden especular con ella incluso los chinos de otras regiones? Ambas respuestas son no, y creo que deberíamos copiar eso urgentemente.