Hace veinte años murió el último de los casi 200 ciudadanos que fracasaron al intentar sortear el más ominoso símbolo de la Guerra Fría. Es la noche del 7 de marzo de 1989. Un alemán de 32 años residente en Berlín Oriental prepara los últimos detalles de la fuga que, si todo sale bien, le permitirá alcanzar la libertad. El muro que separa a las dos Alemanias aún está en pie. Winfried Freudenberg -tal es su nombre- se dedica a llenar con gas doméstico un improvisado globo aerostático.
Comentarios
#3 Bueno, depende a qué le llamemos un preso. Para mí sí lo eran. Una cárcel grande, eso sí. Pero cárcel al fin y al cabo.
off topic: ¿para cuándo monumentos cada 3 metros en las calles de ciudades españolas como en Berlín pidiendo perdón por el Holocausto y el muro?
Aún no he visto nada que diga, "a las victimas del franquismo" en las calles...
#2 No te equivocas http://es.wikipedia.org/wiki/Ca%C3%ADda_del_Muro_de_Berl%C3%ADn
Pero no eran presos, no podían cruzar ese muro, pero en una cárcel no estaban.
#2 No exactamente. Primero por lo que dice #3, y segundo porque el muro no se levantó desde el principio. Se levantó en el momento en que se intensificó la guerra fría y mediática entre ambas partes.
¿Me equivoco si afirmo que el muro fue construido por los comunistas para impedir que huyesen sus propios ciudadanos/presos?