Mercaderes de carne de mujer no son sólo los chuloputas, los tratantes en blancas, los bandidos de burdel o los vicarios palatinos de Berlusconi que le ponen a huevo virgos de doncella en sus fiestorros tripones de una de esas villas de recreo en la costa adriática con piscinorra azul-braguita, casoplón de mil porches, pabellón de mil cuernos y pantalán de tres yates que tanto gustan a los del Hola y a La Lomana . Hay muchos otros mercaderes de carne femenina. Muchos más
Comentarios
No hay quien lea esto. Parece un aglomerado de Pérez-Reverte, Sabina y la Bruja Avería.
sí a la noticia, pero....se poede decir lo mismo sin tanto perifollo.
Cansina por lo que cansa leer el artículo
Este señor tiene un trauma infantil con la yuxtaposición. Por favor, no intenten leer en voz alta el artículo bajo riesgo de atragantamiento.
Para leer esto hay que impostar la voz, como si leyeses un poema