Los mercados están confusos y, lo peor de todo, no saben cuál es la tendencia a seguir. Los analistas no saben cómo se van a comportar en los próximos meses y de las leyes de la oferta y la demanda en muchos casos hemos pasado a economías controladas por los bancos centrales.
¿Y si el problema son los países desarrollados, y dedica casi la mitad del artículo a decir que los países pobres dependen de la demanda de materias primas de china, que está pinchando sus burbujas?
¿Llegará el día en que veamos algunos artículos seguidos en los que los occidentales dejemos de acusarnos a nosotros mismos de todos los males del mundo mundial, venga o no venga a cuento?
Es evidente que los países desarrollados son los que llevan la batuta de la economía mundial.
Es evidente que si hacen algo mal, eso que han hecho tiene efectos visibles sobre la economía mundial.
Es evidente que todo lo que hacen las potencias mundiales afecta a los países más pobres. En España ya estamos temblando porque reventó la burbuja china, y la crisis española empezó cuando pegó un reventon la economía de EEUU y se descubrió que España, o más bien los bancos españoles, habían comprado fondos tóxicos en el otro lado del charco.
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¿Y si el problema son los países desarrollados, y dedica casi la mitad del artículo a decir que los países pobres dependen de la demanda de materias primas de china, que está pinchando sus burbujas?
¿Llegará el día en que veamos algunos artículos seguidos en los que los occidentales dejemos de acusarnos a nosotros mismos de todos los males del mundo mundial, venga o no venga a cuento?
Es evidente que los países desarrollados son los que llevan la batuta de la economía mundial.
Es evidente que si hacen algo mal, eso que han hecho tiene efectos visibles sobre la economía mundial.
Es evidente que todo lo que hacen las potencias mundiales afecta a los países más pobres. En España ya estamos temblando porque reventó la burbuja china, y la crisis española empezó cuando pegó un reventon la economía de EEUU y se descubrió que España, o más bien los bancos españoles, habían comprado fondos tóxicos en el otro lado del charco.