La partida presupuestaria destinada a Justicia descenderá en el año 2014 en un 2,7% y, por lo que respecta a la Asistencia Jurídica Gratuita, su presupuesto quedará congelado.
La cantidad que el Ministerio destinará a Justicia Gratuita en 2014 asciende a la pírrica cifra de 34,15 millones de euros. Gallardón, sin embargo, espera recaudar 300 millones de euros anuales en tasas judiciales, según datos aportados por el propio Ministro. El Gobierno recaudará en concepto de tasas judiciales nueve veces más de lo que destinará a Justicia Gratuita.
Los Presupuestos Generales del Estado demuestran por tanto que el dinero recaudado en tasas judiciales no se destinará ni a la justicia gratuita, (cuya partida se congela a pesar del aumento de la recaudación vía tasas), ni tampoco a otras actividades del propio Ministerio de Justicia, cuyo presupuesto se reduce en un 2,7%.
Todos los ciudadanos tenemos derecho a conocer a que se ha destinado el dinero recaudado con las tasas judiciales por el simple motivo de que las tasas no son un impuesto y, en consecuencia, han de destinarse necesariamente a sufragar el servicio a través del cual se han recaudado. Las tasas judiciales, como tasas que son, deben destinarse necesariamente a mejorar la Justicia.
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La partida presupuestaria destinada a Justicia descenderá en el año 2014 en un 2,7% y, por lo que respecta a la Asistencia Jurídica Gratuita, su presupuesto quedará congelado.
La cantidad que el Ministerio destinará a Justicia Gratuita en 2014 asciende a la pírrica cifra de 34,15 millones de euros. Gallardón, sin embargo, espera recaudar 300 millones de euros anuales en tasas judiciales, según datos aportados por el propio Ministro. El Gobierno recaudará en concepto de tasas judiciales nueve veces más de lo que destinará a Justicia Gratuita.
Los Presupuestos Generales del Estado demuestran por tanto que el dinero recaudado en tasas judiciales no se destinará ni a la justicia gratuita, (cuya partida se congela a pesar del aumento de la recaudación vía tasas), ni tampoco a otras actividades del propio Ministerio de Justicia, cuyo presupuesto se reduce en un 2,7%.
Todos los ciudadanos tenemos derecho a conocer a que se ha destinado el dinero recaudado con las tasas judiciales por el simple motivo de que las tasas no son un impuesto y, en consecuencia, han de destinarse necesariamente a sufragar el servicio a través del cual se han recaudado. Las tasas judiciales, como tasas que son, deben destinarse necesariamente a mejorar la Justicia.