El éxito de Parásitos forma parte de la estela de aquel Nuevo Cine Surcoreano que comenzó hace poco más de veinte años. Por entonces, llegaba a la taquilla local el thriller policíaco Shiri (Swiri, Kang Je-gyu, 1999), una obra que ponía sobre la mesa una de las cuestiones que más preocupaba a los ciudadanos del país asiático: la tensa relación entre el norte y el sur.
La fórmula del blockbuster logró captar la atención del público local adaptando este producto hollywoodiense e incorporando su propia identidad nacional. De esta forma, el espectador surcoreano, por un lado, apuesta con confianza por su propio cine y, por otro, el espectador occidental se despoja del esclavizante exotismo que siempre acompaña a los filmes asiáticos. Así es como la industria cinematográfica de Corea del Sur irrumpía en plena globalización con una estrategia de la que pronto se obtuvieron óptimos resultados a escala mundial.
Cine para fontareros, que diría Pilar Miró, que intentanto imponer su cine se acabó cargándose el sector.
Comentarios
A ver, no nos vengamos arriba.
Ese directo coreano es un puto genio.
Y en el cine coreano encuentras cosas decentes.
Pero hacen mierda como para cubrir de mantillo Castilla la Mancha
La fórmula del éxito: el blockbuster surcoreano
La fórmula del blockbuster logró captar la atención del público local adaptando este producto hollywoodiense e incorporando su propia identidad nacional. De esta forma, el espectador surcoreano, por un lado, apuesta con confianza por su propio cine y, por otro, el espectador occidental se despoja del esclavizante exotismo que siempre acompaña a los filmes asiáticos. Así es como la industria cinematográfica de Corea del Sur irrumpía en plena globalización con una estrategia de la que pronto se obtuvieron óptimos resultados a escala mundial.
Cine para fontareros, que diría Pilar Miró, que intentanto imponer su cine se acabó cargándose el sector.
Train to Busan. Para los que le gusten las pelis bestias de zombis.