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#3:
Qué tiempos... Yo tengo 22 años y aunque no viví esa época, he jugado más en la calle que en casa y cuando lo hacía en casa era con muñecos, la consola era si a caso algún fin de semana que nos portásemos bien.
En la calle de todo, jugar al fútbol en un patio con escaleras en medio del campo (qué regates y qué todo se hacían en los escalones jaja) ... que tiempos, pero si hemos jugado hasta al beisbol (aquí en español todo!
) con un palo y una pelota de tenis.
En cambio ahora ... de todos modos, miro atrás y me encantaría volver a tumbarme en el suelo de mi habitación, con mis muñecos pasando tardes y tardes de diversión, con mi única preocupación de qué serie de dibujos van a poner mañana y de si mis padres me comprarán el nuevo (inserte nombre de muñeco), porque mañana va a dar igual, iré al cole, jugaré en el recreo y por la tarde, con el bocata otra vez al patio del colegio a jugar al futbol, luego a casa, los dibujos, los muñecos, el baño y a la cama.
Joder pero ¿no era eso vida? ayss, a veces cuando estoy en mi habitación y nadie me ve, juego con los muñecos en la cama, pero ya no tiene gracia. Aún así a veces me compro algunos (hace poco compré unos cuandos de bola de dragón jaja) para recordar los viejos tiempos, no hay nada mejor.
En fin, que lloro.
En la calle de todo, jugar al fútbol en un patio con escaleras en medio del campo (qué regates y qué todo se hacían en los escalones jaja) ... que tiempos, pero si hemos jugado hasta al beisbol (aquí en español todo!
) con un palo y una pelota de tenis.En cambio ahora ... de todos modos, miro atrás y me encantaría volver a tumbarme en el suelo de mi habitación, con mis muñecos pasando tardes y tardes de diversión, con mi única preocupación de qué serie de dibujos van a poner mañana y de si mis padres me comprarán el nuevo (inserte nombre de muñeco), porque mañana va a dar igual, iré al cole, jugaré en el recreo y por la tarde, con el bocata otra vez al patio del colegio a jugar al futbol, luego a casa, los dibujos, los muñecos, el baño y a la cama.
Joder pero ¿no era eso vida? ayss, a veces cuando estoy en mi habitación y nadie me ve, juego con los muñecos en la cama, pero ya no tiene gracia. Aún así a veces me compro algunos (hace poco compré unos cuandos de bola de dragón jaja) para recordar los viejos tiempos, no hay nada mejor.
En fin, que lloro.
#15:
Yo tengo 24 y nunca jugué en la calle. Mis padres no me dejaban. Gracias Papa y Mama por sobreprotegerme y hacer que hoy sea una persona insegura y antisocial.
#30:
Pero os habeis dado cuenta lo distintos que son ahora los parques?
yo recuerdo jugar en los columpios de mi colegio y en un parque de mi barrio... Había un montón de columpios, todos de hierro y cada cual más fabuloso. Nosotros de aquella tendríamos 6 o 7 años y no nos atrevíamos a subir a todos, porque algunos eran realmente altos y nos daba canguelo, pero en aquel parque jugábamos a las esquinas, alturitas, a 17pi, escondite, la guerra de piedras, y nunca nadie se hizo nada serio... hoy en día ves los parques, y tienen esa especie de alfombrita para que los niños no se hagan daño si se caen, un columpio con 2 o 3 asientos como mucho, un tobogán de risa y un subeybaja con suerte. Lo que antes era un parque para todos, ahora es para niños de 3 años, y cuidado con que no se metan a jugar niños un poco mayores, porque pueden hacer daño a los pequeños(eso lo he visto yo, papas echando a niños de 7 u 8 años del parque porque podían hacer daño a los más pequeños). Cómo van a jugar los niños en la calle si no tienen donde jugar?, las plazas ahora son para las terrazas de las cafeterías, y los parques para los niños más pequeños. Además yo recuerdo salir en pandilla, con 6 o 7 años, y no pasaba nada. Eramos todos niños del barrio, yo tenía eso, 6-7 años, mi hermana 2 menos y las vecinas que se "ocupaban" de nosotras tenían 9 y 10. Jugábamos todos juntos, y si un niño llegaba con las rodillas peladas no pasaba nada, se limpiaba con agua oxigenada y una poca mercromina y listo pal día siguiente. Hoy en día los padres son unos exagerados, y aunque tú no quieras serlo te hacen sentir mal. Mi mejor amiga tiene una cría de 7 años, es la cosa más rica que puedes echarte en cara, y además está muy bien educada. Un día jugando en una pista cerca de su casa, la niña se raspó un poco las rodillas patinando, al caer la niña se echó a llorar por la caída(llevaba rodilleras, casco y coderas por lo que no se hizo daño realmente) pues cuando la niña estaba empezando a calmarse, los otros papás insistieron tanto en que la niña podía haberse echo daño realmente que la llevasen al médico(si si, por una caída de los patines que la llevasen al médico)que la niña empezó a asustarse y tuvieron que irse del parque ante la insistente "preocupación" de los otros padres. Eso es una exageración, y no faltó quien llamó "malos padres" a mis amigos por no "atender debidamente" a la niña.
Así no me extraña que luego los niños les coman las papas a los padres...
yo recuerdo jugar en los columpios de mi colegio y en un parque de mi barrio... Había un montón de columpios, todos de hierro y cada cual más fabuloso. Nosotros de aquella tendríamos 6 o 7 años y no nos atrevíamos a subir a todos, porque algunos eran realmente altos y nos daba canguelo, pero en aquel parque jugábamos a las esquinas, alturitas, a 17pi, escondite, la guerra de piedras, y nunca nadie se hizo nada serio... hoy en día ves los parques, y tienen esa especie de alfombrita para que los niños no se hagan daño si se caen, un columpio con 2 o 3 asientos como mucho, un tobogán de risa y un subeybaja con suerte. Lo que antes era un parque para todos, ahora es para niños de 3 años, y cuidado con que no se metan a jugar niños un poco mayores, porque pueden hacer daño a los pequeños(eso lo he visto yo, papas echando a niños de 7 u 8 años del parque porque podían hacer daño a los más pequeños). Cómo van a jugar los niños en la calle si no tienen donde jugar?, las plazas ahora son para las terrazas de las cafeterías, y los parques para los niños más pequeños. Además yo recuerdo salir en pandilla, con 6 o 7 años, y no pasaba nada. Eramos todos niños del barrio, yo tenía eso, 6-7 años, mi hermana 2 menos y las vecinas que se "ocupaban" de nosotras tenían 9 y 10. Jugábamos todos juntos, y si un niño llegaba con las rodillas peladas no pasaba nada, se limpiaba con agua oxigenada y una poca mercromina y listo pal día siguiente. Hoy en día los padres son unos exagerados, y aunque tú no quieras serlo te hacen sentir mal. Mi mejor amiga tiene una cría de 7 años, es la cosa más rica que puedes echarte en cara, y además está muy bien educada. Un día jugando en una pista cerca de su casa, la niña se raspó un poco las rodillas patinando, al caer la niña se echó a llorar por la caída(llevaba rodilleras, casco y coderas por lo que no se hizo daño realmente) pues cuando la niña estaba empezando a calmarse, los otros papás insistieron tanto en que la niña podía haberse echo daño realmente que la llevasen al médico(si si, por una caída de los patines que la llevasen al médico)que la niña empezó a asustarse y tuvieron que irse del parque ante la insistente "preocupación" de los otros padres. Eso es una exageración, y no faltó quien llamó "malos padres" a mis amigos por no "atender debidamente" a la niña.
Así no me extraña que luego los niños les coman las papas a los padres...
#38:
este texto lo tengo guardado y de vez en cuando lo leo.... lo dejo para que os deleiteis....
Nosotros viajábamos en coches, que no tenían cinturón de seguridad y mucho menos airbag. . . Hacíamos viajes de 10 o 12 horas, cinco personas en un 600, y no sufríamos el síndrome de la clase turista.
. No tuvimos puertas, armarios o frascos de medicinas con tapa a prueba de niños.
. Andábamos en bicicleta sin casco y hacíamos auto-stop.
. Los columpios eran de metal y tenían las esquinas en pico. Jugábamos a "lo que hace la madre hacen los hijos", esto es, a ver quién era el más bestia.
. Pasábamos horas construyendo nuestros carros con rodamientos para bajar por las cuestas y descubríamos que nos habíamos olvidado de los frenos, cuando nos dejábamos los morros contra algún árbol. Pero a la siguiente vez, ya habíamos aprendido a resolver el problema.
. Jugábamos a "churro va" y nadie sufrió hernia ni dislocaciones vertebrales.
. Salíamos de casa por la mañana, jugábamos todo el día y solo volvíamos cuando se encendían las farolas en la calle. Mientras tanto, estábamos ilocalizables.
. Nos las ingeniábamos para conseguir maderas con que hacer una fogata, alrededor de la cual nos pasábamos horas y horas, asando patatas y contando historias de miedo.
. No había móviles.
. Nos rompíamos los dientes y los huesos, y no había ley que castigara a los culpables. Nos abríamos las cabezas jugando a guerra de piedras, y no pasaba nada, eran cosas de niños, que se curaban con Mercromina y, a veces, con un par de puntos. Todo en orden. Nadie a quien culpar, solo a nosotros mismos.
. Tuvimos peleas, nos "esmorramos" unos a otros y aprendimos a superarlo
. Comíamos dulces y bebíamos brebajes edulcorados de dudosa procedencia, pero no éramos obesos; si acaso, alguno era gordo y punto.
. Estábamos siempre al aire libre, corriendo y jugando.
. Compartimos las botellas de refrescos con los amigos y nadie se contagió de nada. Solo nos contagiábamos los piojos en el cole, cosa que nuestras madres arreglaban, lavándonos la cabeza con vinagre caliente.
. No tuvimos Playstation, Nintendo 64, vídeo juegos, 99 canales de televisión, películas en vídeo, sonido surround, móviles, computadoras, ni Internet. Pero tuvimos amigos. Quedábamos con ellos y salíamos. O ni siquiera quedábamos: salíamos a la calle y allí nos los encontrábamos.
. Y jugábamos a las chapas, al peón, a las bolas, a la lima, al rescate..., en fin, tecnología punta. Íbamos en la bici, o andando, hasta casa del colega, nosotros solos, a puro huevo, en medio de un mundo cruel y despiadado, sin pedir permiso a los padres ni a ningún adulto, que se responsabilizara de nosotros... y sobrevivimos. ¿Cómo lo conseguimos?
. Con una tiza, pintábamos en la pared la portería, nos fabricábamos artesanalmente un balón y ya teníamos montado el mundial de fútbol.
. Comimos pipas y, aunque dijeron que pasaría, nunca nos crecieron en la tripa, ni tuvieron que operarnos para sacarlas.
. Bebíamos agua sin embotellar, directamente del grifo y algunos incluso lo chupaban.
. Íbamos a cazar lagartijas y pájaros con la escopeta de perdigones, si tener la mayoría de edad y sin la vigilancia de un adulto. ¡Oh, Dios mío!
. En la escuela, no todos formaban parte del equipo de fútbol o baloncesto, pero aprendimos a superar la decepción, sin tener que recurrir a psicólogos de esos.
. Algunos estudiantes no eran tan inteligentes como otros y repitieron curso. ¡Qué horror, no había exámenes de recuperación!
. Los profesores siempre tenían razón, que para eso eran los profesores. Cuando nos castigaban nunca encontramos complicidad en nuestros padres, jamás nos disculparon: "algo habrás hecho", era el comentario más dulce al que podíamos aspirar.
. Cuando suspendíamos nos castigaban sin vacaciones o, por lo menos, te obligaban a estudiar durante todo el verano, con un horario implacable.
. Si queríamos establecer relaciones con el sexo opuesto, buscábamos el roce, nos iba el cuerpo a cuerpo, queríamos saber como era la piel del otro y, en más de una ocasión, nos ganábamos un guantazo, pero todo era en vivo, en directo y en castellano; chatear era ir de vinos, no una reunión de mutantes, que se comunican mediante signos extraños como o jeroglíficos de parecida índole.
. Éramos responsables de nuestras acciones y arreábamos con las consecuencias. No había nadie para resolver eso. Si transgredíamos alguna ley, era impensable la idea de un padre protector, porque ellos protegían las leyes.
. Tuvimos libertad, fracaso, éxito, responsabilidad y aprendimos a crecer con todo ello.
Nosotros viajábamos en coches, que no tenían cinturón de seguridad y mucho menos airbag. . . Hacíamos viajes de 10 o 12 horas, cinco personas en un 600, y no sufríamos el síndrome de la clase turista.
. No tuvimos puertas, armarios o frascos de medicinas con tapa a prueba de niños.
. Andábamos en bicicleta sin casco y hacíamos auto-stop.
. Los columpios eran de metal y tenían las esquinas en pico. Jugábamos a "lo que hace la madre hacen los hijos", esto es, a ver quién era el más bestia.
. Pasábamos horas construyendo nuestros carros con rodamientos para bajar por las cuestas y descubríamos que nos habíamos olvidado de los frenos, cuando nos dejábamos los morros contra algún árbol. Pero a la siguiente vez, ya habíamos aprendido a resolver el problema.
. Jugábamos a "churro va" y nadie sufrió hernia ni dislocaciones vertebrales.
. Salíamos de casa por la mañana, jugábamos todo el día y solo volvíamos cuando se encendían las farolas en la calle. Mientras tanto, estábamos ilocalizables.
. Nos las ingeniábamos para conseguir maderas con que hacer una fogata, alrededor de la cual nos pasábamos horas y horas, asando patatas y contando historias de miedo.
. No había móviles.
. Nos rompíamos los dientes y los huesos, y no había ley que castigara a los culpables. Nos abríamos las cabezas jugando a guerra de piedras, y no pasaba nada, eran cosas de niños, que se curaban con Mercromina y, a veces, con un par de puntos. Todo en orden. Nadie a quien culpar, solo a nosotros mismos.
. Tuvimos peleas, nos "esmorramos" unos a otros y aprendimos a superarlo
. Comíamos dulces y bebíamos brebajes edulcorados de dudosa procedencia, pero no éramos obesos; si acaso, alguno era gordo y punto.
. Estábamos siempre al aire libre, corriendo y jugando.
. Compartimos las botellas de refrescos con los amigos y nadie se contagió de nada. Solo nos contagiábamos los piojos en el cole, cosa que nuestras madres arreglaban, lavándonos la cabeza con vinagre caliente.
. No tuvimos Playstation, Nintendo 64, vídeo juegos, 99 canales de televisión, películas en vídeo, sonido surround, móviles, computadoras, ni Internet. Pero tuvimos amigos. Quedábamos con ellos y salíamos. O ni siquiera quedábamos: salíamos a la calle y allí nos los encontrábamos.
. Y jugábamos a las chapas, al peón, a las bolas, a la lima, al rescate..., en fin, tecnología punta. Íbamos en la bici, o andando, hasta casa del colega, nosotros solos, a puro huevo, en medio de un mundo cruel y despiadado, sin pedir permiso a los padres ni a ningún adulto, que se responsabilizara de nosotros... y sobrevivimos. ¿Cómo lo conseguimos?
. Con una tiza, pintábamos en la pared la portería, nos fabricábamos artesanalmente un balón y ya teníamos montado el mundial de fútbol.
. Comimos pipas y, aunque dijeron que pasaría, nunca nos crecieron en la tripa, ni tuvieron que operarnos para sacarlas.
. Bebíamos agua sin embotellar, directamente del grifo y algunos incluso lo chupaban.
. Íbamos a cazar lagartijas y pájaros con la escopeta de perdigones, si tener la mayoría de edad y sin la vigilancia de un adulto. ¡Oh, Dios mío!
. En la escuela, no todos formaban parte del equipo de fútbol o baloncesto, pero aprendimos a superar la decepción, sin tener que recurrir a psicólogos de esos.
. Algunos estudiantes no eran tan inteligentes como otros y repitieron curso. ¡Qué horror, no había exámenes de recuperación!
. Los profesores siempre tenían razón, que para eso eran los profesores. Cuando nos castigaban nunca encontramos complicidad en nuestros padres, jamás nos disculparon: "algo habrás hecho", era el comentario más dulce al que podíamos aspirar.
. Cuando suspendíamos nos castigaban sin vacaciones o, por lo menos, te obligaban a estudiar durante todo el verano, con un horario implacable.
. Si queríamos establecer relaciones con el sexo opuesto, buscábamos el roce, nos iba el cuerpo a cuerpo, queríamos saber como era la piel del otro y, en más de una ocasión, nos ganábamos un guantazo, pero todo era en vivo, en directo y en castellano; chatear era ir de vinos, no una reunión de mutantes, que se comunican mediante signos extraños como o jeroglíficos de parecida índole.
. Éramos responsables de nuestras acciones y arreábamos con las consecuencias. No había nadie para resolver eso. Si transgredíamos alguna ley, era impensable la idea de un padre protector, porque ellos protegían las leyes.
. Tuvimos libertad, fracaso, éxito, responsabilidad y aprendimos a crecer con todo ello.
#9:
Me extrañan que no salgan las canicas...
Por cierto, las generaciones intermedias jugábamos a los tazos
Por cierto, las generaciones intermedias jugábamos a los tazos
Comentarios
Qué tiempos... Yo tengo 22 años y aunque no viví esa época, he jugado más en la calle que en casa y cuando lo hacía en casa era con muñecos, la consola era si a caso algún fin de semana que nos portásemos bien.
) con un palo y una pelota de tenis.
En la calle de todo, jugar al fútbol en un patio con escaleras en medio del campo (qué regates y qué todo se hacían en los escalones jaja) ... que tiempos, pero si hemos jugado hasta al beisbol (aquí en español todo!
En cambio ahora ... de todos modos, miro atrás y me encantaría volver a tumbarme en el suelo de mi habitación, con mis muñecos pasando tardes y tardes de diversión, con mi única preocupación de qué serie de dibujos van a poner mañana y de si mis padres me comprarán el nuevo (inserte nombre de muñeco), porque mañana va a dar igual, iré al cole, jugaré en el recreo y por la tarde, con el bocata otra vez al patio del colegio a jugar al futbol, luego a casa, los dibujos, los muñecos, el baño y a la cama.
Joder pero ¿no era eso vida? ayss, a veces cuando estoy en mi habitación y nadie me ve, juego con los muñecos en la cama, pero ya no tiene gracia. Aún así a veces me compro algunos (hace poco compré unos cuandos de bola de dragón jaja) para recordar los viejos tiempos, no hay nada mejor.
En fin, que lloro.
Yo tengo 24 y nunca jugué en la calle. Mis padres no me dejaban. Gracias Papa y Mama por sobreprotegerme y hacer que hoy sea una persona insegura y antisocial.
Pero os habeis dado cuenta lo distintos que son ahora los parques?
yo recuerdo jugar en los columpios de mi colegio y en un parque de mi barrio... Había un montón de columpios, todos de hierro y cada cual más fabuloso. Nosotros de aquella tendríamos 6 o 7 años y no nos atrevíamos a subir a todos, porque algunos eran realmente altos y nos daba canguelo, pero en aquel parque jugábamos a las esquinas, alturitas, a 17pi, escondite, la guerra de piedras, y nunca nadie se hizo nada serio... hoy en día ves los parques, y tienen esa especie de alfombrita para que los niños no se hagan daño si se caen, un columpio con 2 o 3 asientos como mucho, un tobogán de risa y un subeybaja con suerte. Lo que antes era un parque para todos, ahora es para niños de 3 años, y cuidado con que no se metan a jugar niños un poco mayores, porque pueden hacer daño a los pequeños(eso lo he visto yo, papas echando a niños de 7 u 8 años del parque porque podían hacer daño a los más pequeños). Cómo van a jugar los niños en la calle si no tienen donde jugar?, las plazas ahora son para las terrazas de las cafeterías, y los parques para los niños más pequeños. Además yo recuerdo salir en pandilla, con 6 o 7 años, y no pasaba nada. Eramos todos niños del barrio, yo tenía eso, 6-7 años, mi hermana 2 menos y las vecinas que se "ocupaban" de nosotras tenían 9 y 10. Jugábamos todos juntos, y si un niño llegaba con las rodillas peladas no pasaba nada, se limpiaba con agua oxigenada y una poca mercromina y listo pal día siguiente. Hoy en día los padres son unos exagerados, y aunque tú no quieras serlo te hacen sentir mal. Mi mejor amiga tiene una cría de 7 años, es la cosa más rica que puedes echarte en cara, y además está muy bien educada. Un día jugando en una pista cerca de su casa, la niña se raspó un poco las rodillas patinando, al caer la niña se echó a llorar por la caída(llevaba rodilleras, casco y coderas por lo que no se hizo daño realmente) pues cuando la niña estaba empezando a calmarse, los otros papás insistieron tanto en que la niña podía haberse echo daño realmente que la llevasen al médico(si si, por una caída de los patines que la llevasen al médico)que la niña empezó a asustarse y tuvieron que irse del parque ante la insistente "preocupación" de los otros padres. Eso es una exageración, y no faltó quien llamó "malos padres" a mis amigos por no "atender debidamente" a la niña.
Así no me extraña que luego los niños les coman las papas a los padres...
Me extrañan que no salgan las canicas...
Por cierto, las generaciones intermedias jugábamos a los tazos
este texto lo tengo guardado y de vez en cuando lo leo.... lo dejo para que os deleiteis....
Nosotros viajábamos en coches, que no tenían cinturón de seguridad y mucho menos airbag. . . Hacíamos viajes de 10 o 12 horas, cinco personas en un 600, y no sufríamos el síndrome de la clase turista.
. No tuvimos puertas, armarios o frascos de medicinas con tapa a prueba de niños.
. Andábamos en bicicleta sin casco y hacíamos auto-stop.
. Los columpios eran de metal y tenían las esquinas en pico. Jugábamos a "lo que hace la madre hacen los hijos", esto es, a ver quién era el más bestia.
. Pasábamos horas construyendo nuestros carros con rodamientos para bajar por las cuestas y descubríamos que nos habíamos olvidado de los frenos, cuando nos dejábamos los morros contra algún árbol. Pero a la siguiente vez, ya habíamos aprendido a resolver el problema.
. Jugábamos a "churro va" y nadie sufrió hernia ni dislocaciones vertebrales.
. Salíamos de casa por la mañana, jugábamos todo el día y solo volvíamos cuando se encendían las farolas en la calle. Mientras tanto, estábamos ilocalizables.
. Nos las ingeniábamos para conseguir maderas con que hacer una fogata, alrededor de la cual nos pasábamos horas y horas, asando patatas y contando historias de miedo.
. No había móviles.
. Nos rompíamos los dientes y los huesos, y no había ley que castigara a los culpables. Nos abríamos las cabezas jugando a guerra de piedras, y no pasaba nada, eran cosas de niños, que se curaban con Mercromina y, a veces, con un par de puntos. Todo en orden. Nadie a quien culpar, solo a nosotros mismos.
. Tuvimos peleas, nos "esmorramos" unos a otros y aprendimos a superarlo
. Comíamos dulces y bebíamos brebajes edulcorados de dudosa procedencia, pero no éramos obesos; si acaso, alguno era gordo y punto.
. Estábamos siempre al aire libre, corriendo y jugando.
. Compartimos las botellas de refrescos con los amigos y nadie se contagió de nada. Solo nos contagiábamos los piojos en el cole, cosa que nuestras madres arreglaban, lavándonos la cabeza con vinagre caliente.
. No tuvimos Playstation, Nintendo 64, vídeo juegos, 99 canales de televisión, películas en vídeo, sonido surround, móviles, computadoras, ni Internet. Pero tuvimos amigos. Quedábamos con ellos y salíamos. O ni siquiera quedábamos: salíamos a la calle y allí nos los encontrábamos.
. Y jugábamos a las chapas, al peón, a las bolas, a la lima, al rescate..., en fin, tecnología punta. Íbamos en la bici, o andando, hasta casa del colega, nosotros solos, a puro huevo, en medio de un mundo cruel y despiadado, sin pedir permiso a los padres ni a ningún adulto, que se responsabilizara de nosotros... y sobrevivimos. ¿Cómo lo conseguimos?
. Con una tiza, pintábamos en la pared la portería, nos fabricábamos artesanalmente un balón y ya teníamos montado el mundial de fútbol.
. Comimos pipas y, aunque dijeron que pasaría, nunca nos crecieron en la tripa, ni tuvieron que operarnos para sacarlas.
. Bebíamos agua sin embotellar, directamente del grifo y algunos incluso lo chupaban.
. Íbamos a cazar lagartijas y pájaros con la escopeta de perdigones, si tener la mayoría de edad y sin la vigilancia de un adulto. ¡Oh, Dios mío!
. En la escuela, no todos formaban parte del equipo de fútbol o baloncesto, pero aprendimos a superar la decepción, sin tener que recurrir a psicólogos de esos.
. Algunos estudiantes no eran tan inteligentes como otros y repitieron curso. ¡Qué horror, no había exámenes de recuperación!
. Los profesores siempre tenían razón, que para eso eran los profesores. Cuando nos castigaban nunca encontramos complicidad en nuestros padres, jamás nos disculparon: "algo habrás hecho", era el comentario más dulce al que podíamos aspirar.
. Cuando suspendíamos nos castigaban sin vacaciones o, por lo menos, te obligaban a estudiar durante todo el verano, con un horario implacable.
. Si queríamos establecer relaciones con el sexo opuesto, buscábamos el roce, nos iba el cuerpo a cuerpo, queríamos saber como era la piel del otro y, en más de una ocasión, nos ganábamos un guantazo, pero todo era en vivo, en directo y en castellano; chatear era ir de vinos, no una reunión de mutantes, que se comunican mediante signos extraños como o jeroglíficos de parecida índole.
. Éramos responsables de nuestras acciones y arreábamos con las consecuencias. No había nadie para resolver eso. Si transgredíamos alguna ley, era impensable la idea de un padre protector, porque ellos protegían las leyes.
. Tuvimos libertad, fracaso, éxito, responsabilidad y aprendimos a crecer con todo ello.
#12 "Churro va " "Churro , mediamanga, mangaentera" ...no se, tiene muchos nombres... y es un de los pocos juegos infantiles que , junto los medicos y papas y mamas, acaba teniendo otro significado conforme pasas etapas de tu vida
Saludos
¿Padres y abuelos? ... Vaya. Yo con 27 años que tengo menos el salto de altura sobre asfalto y pasear en calesa tirada por un caimán he pasado horas y horas jugando a todos los demás. Sniff... qué melancolía. Meneo.
He crecido jugando al escondite, a pillar, y a miles de juegos que supongo que en cada zona tendrán su propio nombre y sin tocar nunca una consola, de hecho creo que la primera vez que me puse delante de una sería sobre los 15 años y no me atraen para nada
En los ultimos años [tengo 25] he jugado varias veces, pero tampoco es algo que me atraiga tanto
Prefiero navegar
Los niños de antes ??
Y los de ahora, lo que pasa que ahora es más raro porque en la ciudades es raro encontrar un descampado o un parque, ya que todo es edificio o calle.
A los que tengan treinta y pocos e hijos, y les puedan contar que antes llegaron a ver la tele en blanco y negro para pasar a una de 32" ... o de tener un telefono "de rueda" a un movil... se pueden dar cuenta de la revolución tecnologica que ha habido.
Y si, aunque algunos jugaramos a estos juegos pensamos, joer esto no lo habia en mi epoca.
Salvo en la última foto, todo son niños ¿dónde estaban las niñas?
Uno de los mayores triunfos del neo liberalismo ha sido socialmente la individualizacion, desde pequeños se esta educando en el miedo.
Miedo a dejar a los niños solos en la calle por que puede venir cualquier depravado o asesino, el miedo ha sido un arma poderosa desde los principios de la humanidad.
Individualizandonos nos volvemos debiles, estando delante del PC o de la Play tambien, nuestros hijos se vuelven flacidos y debiles, no se saben relacionar con los demas, se encierran en un mundo virtual y falso.
¿Os acordais hace 15 años mas o menos aquello tan famosos de la competitividad?, aquello consistia en pisarle el cuello al compañero para pasar tu por encima de el, se nos quito de la cabeza que la union de ideas y el esfuerzo comunitario revalorizava al espiritu humano, politicos como el Jordi Pujol, se les llenaba la boca con esta palabra.
Ellos, los gobernantes siguen una agenda y la cumplen paso a paso, luego llego la globalizacion y mañana que vendra...
Llamarme paranoico o conspiranoico a estas alturas me da lo mismo, pero el que uestros hijos no jueguen en la calle no es casual e sun plan tramada, y no, la culpa no la tienen los inmigrantes venidos a España, ese es otro tema. Por cierto tambien impuesto por los mismos.
¡Aquellos maravillosos años! Era otra época, incluso ahora en los pueblos ya no se ven tantos críos en la calle jugando.
Yo si tuve la suerte de poder jugar de niña en la calle de mi casa, a "la burra" "balon-tiro" "pilla-pilla" y nuestros padres en verano sentados en la calle tomando la "fresca". Entonces jugábamos las chicas con los chicos haciendo grupos mezclados y si hacía mal tiempo en el almacén de cualquiera a jugar a las cartas, poner música con un "casete" o a leer tebeos.
¡Que vieja soy!
#6 ,
Felicidades, a tí, por el blog y a Guillermo por Inés.
Jo, yo jugaba a las tabas... aún andan en algún cajón
En mi colegio era "churro-mediamanga-mangaentera", que los profesores acabaron prohibiendo que lo jugáramos en el patio porque una chica se hizo daño en el cuello y hubo de llevar collarín un tiempo.
Creo que entrar en decir "oh, las consolas no son tan buenas como los inocentes juegos de entonces", es caer en una mentira gordísima y una cursilería, así que no lo haré. Los tiempos, eran distintos, los juegos eran distintos. Mi padre de niño se divertía llenando ranas de agua y cazando pájaros con tirachinas y eso hoy día sería considerado una salvajada propia de asesinos psicópatas en potencia, pero entonces era tan normal como hoy lo es el Nintedogs... distintos tiempos, distintos juegos.
Dita
No sé como le llamaríais en otros sitios, pero mi preferida es la del "churro-pico-tena" sobre todo la foto en España... El niño que hacía de almohadilla... jajaja... Es enorme ... y siempre cogíamos al más gordo (y mejor que fuera así, porque si le tocaba saltar, nos hundía)
Qué tiempos aquellos...! (aunque faltaran años para que yo naciera)
La fotografía de la niña con su carretilla tirada por un cocodrilo de verdad... me ha emocionao.
Yo recuerdo que mi padre decía exactamente lo mismito que vosotros estáis diciendo cuando yo era peque: que él tenía menos juguetes y se lo pasaba mejor, que en sus tiempos todo era más inocente, que echaba de menos los juegos y las cosas que hacía de pequeño...
Cada época es diferente, cada generación es distinta. Es normal que los niños de ahora consideren aburridos los juegos de antaño, y también lo es que nosotros los extrañemos. Pero la sociedad es así, estamos en constante evolución: no puedes pedirle a un niño que tiene veinticinco videoconsolas y cien juguetes de última generación que se ponga a darle golpecitos a unas chapas, porque no tiene sentido.
No podemos proyectar nuestra nostalgia de un modo tan equivocado y acabar mirando mal a los niños de ahora porque no hacen lo que nosotros hicimos. Ésta es su infancia, la nuestra ya se fue (aunque nos duela).
El crio que salta entre las columnas de piedras es Sergei Bubka?...Vaya máquina...
El principal problema son los coches: en 1970 por el barrio pasaba uno cada diez minutos y los oías llegar antes de que fueran peligrosos. En 2008 pasa uno cada diez segundos...
Madrid: http://www.flickr.com/photos/george_eastman_house/2677559569/
# 15 Pues ya vas teniendo edad pa poder dejar meneame y salir a la calle... te lo digo yo que... emmmmm ejem estoo... nada, olvidalo..:P
#20 pues que hagan plazas, coñe, y parques, ese no es el problema. La cosa es que éramos mucho más libres, estábamos menos encorsetados porque no había esa obsesión por aprovechar las horas, que esté vigilado todo el tiempo... Yo salía del cole, tiraba la mochila, cogía el trozo de pan con margarina y azúcar (yammmm) y me lanzaba a la calle hasta las 8 de la tarde haciendo lo que me daba la gana. He cazado grillos, he jugado en edificios en obras con hierros oxidados por todas partes, he "naufragado" en la ría tratando de "robar" una lancha...
Era otra forma de vida, y de entretenerse, físicamente más sana (eso sí) pero menos mal que los chavales de ahora (esos niños llave) tienen las consolas... ¿qué harían sino todas las horas que están encerrados en casa solos sin permiso para salir a buscar amigos o lo que sea, y sin hermanos con los que pelearse y jugar? Hablarle a los madelman todo el día también era aburrido si no había nadie más a tu alrededor... Estar solo todo el rato debe ser muy aburrido...
#29 en mi barrio los chicos también jugaban a la comba y la goma (que es la luneta?)... y yo he jugado mucho a las canicas...
Sigue habiendo niños jugando en las calles;los de los inmigrantes, que parecen mucho más felices que los nuestros.Qué cosas.
Los que estamos aquí comentando, que hemos probado los dos mundos, sabemos muy bien con cual nos quedamos. Con 10 años coger la bicicleta e ir con los compañeros a explorar mundo, sólo unos pocos km, pero te sentías como el el jodido Livingstone cuando encontrabas una charca con ranas, o un buen sitio para jugar el fútbol...
Puedo decir que de pequeño, yo era realmente libre.
Y digo que conozco los dos mundos, porque en cierta época los padres se piensan que sin actividades extraescolares (inglés, música, natación, dibujo...) el niño va a salir más tonto que el del vecino que tiene toda la tarde ocupada con 100 cursillos. Así de paso los tenemos encerrados y evitamos que sea raptado por el secuestrador de niños que apareció el otro día en las noticias de A3.
Siempre me quedaran las cicatrices en las rodillas para saber que un día fui feliz.
El churro-va es el único juego de esos que no echo nada de menos, la cantidad de dolores de espalda crónicos que ha provocado en una generación...
Lista de juegos "callejeros":
Churro va.(todos)
Escondite. (todos)
El bote. (todos)
la luneta (ellas)
la comba (ellas)
el telégrafo (todos)
las tabas (ellas)
canicas (ellos)
chapas (ellos)
guá (ellos)
Pillar (todos)
saltar (encima de cada uno y diciendo algo)
adivinar qué marca era el coche que se oía (te ponías de espaldas a la calle, había pocos modelos y menos coches, claro).
...con ellos tuve mi primer beso, mi primera travesura y descubrí la soledad de los portales, la frialdad de la calle...en fin mil y una sensaciones que nos trasmitía un entorno urbano pero amigable, donde entrábamos todos en tromba al bar de la esquina y el dueño nos daba vasos de agua a todos...
#30 es que cuando yo era pequeño habia plazas para jugar y no mamotretos de cemento vallados y sin una triste planta como hay ahora. Para que se pueda jugar en la calle debe haber unos acondicionamientos minimos, espacio, poco tráfico, un puestecito de chucherias.... y no tener que gastarte 100 euros para que tus crios jueguen en un chikipark o tener que llevarlos al McDonald para que se tiren a la piscina de bolas.
#9 , en la foto que se alude a España (5º fotografía).
http://i364.photobucket.com/albums/oo86/foticosmias/canicas.jpg
#1 No... yo estoy soltero y sin niños jajajaja...
Es la hija (nació ayer) de Guillermo
A mí déjame como estoy jajajaa
Nosotros jugábamos a "barrenar". En un patio que teníamos de 10 x 5 metros con muros por casi los cuatro costados, soltábamos un balón y a seis o siete cafres (nosotros) y el juego era pegarle un viaje espectacular a la bola en cualquier dirección. Molaba!!!
Mítico liebre, qué grande. O el "Marro". Un tipo en el medio tenía que atrapar a cualquiera de los demás, que corrían de el extremo A al B del campo de juego una y otra vez, cuadno atrapaba a uno éste se le unía y ya eran dos en el medio. Recuerdo que había una chica australiana en mi piso que se descalzaba y corría como el viento, jamás la tocábamos.
De todas formas, tengo que reconocer que el juego número 1 de mi infancia fue el fútbol.
He de decir también que luego llegaron los videojuegos y también me subí al carro. El paso previo fueron las famosas maquinitas del donkey kong y similares que ya nos tenían a todos los niños enganchados a principios de los 90. Hoy me encanta jugar online carreras de F1 y shooters en primera persona. En cambio ya no juego al escondite ni a liebre
Qué tiempos.
Me inflareis a negativos pero bueno... vivo en un barrio donde los niños aún juegan en la calle y es un COÑAZO, no es normal que salgan a las 4 a la calle y se tiren hasta las 10 o las 11 (eso con suerte) jugando a la pelota en la pared de los vecinos, a la comba ocupando toda la calle, y atropellando con su bici a todo el mundo, todo esto acompañado por un sin fin de berridos que no dejan a los demás ver la tele, estudiar o simplemente vivir tranquilos. Por cierto en esta zona SÍ que hay parques, pero es más cómodo tener a tu niño en tu misma calle solo y tu mientras tanto ver la novela de la sobremesa. En fin, yo solo rezo para que alguien les regale una play y un libro.
Qué coño televisión ni playstation ni nada... en mi ciudad hace lustros que en los parques públicos se ven las señales: "Prohibido jugar a la pelota" y "Prohibido andar en bicicleta"...
#39, las niñas estaban aprendiendo a coser.
Yo tengo 24 años y mi infancia fue parecida a la de #3 por lo que veo.
Salía al recreo y jugábamos a polis y cacos o al fútbol.
Al salir del cole a las 5 de la tarde, íbamos corriendo a casa, picábamos para avisar de que nos quedábamos jugando a la pelota media hora en la calle. Había un padre que no trabajaba por las tardes que siempre jugaba con nosotros.
Luego subíamos, hacíamos los deberes mientras merendabas y todavía me daba tiempo a ver los dibujos y sacar todos los playmobil que tenía. Todo mezclado, la isla, el fuerte, el salón y la cárcel (del oeste), motoristas, coches... Luego a cenar y para la cama.
Más adelante, cuando tuve la Master System II, me dejaban jugar los fines de semana un rato, normalmente los sábados y los domingos por la mañana, pero por semana ni olerla.
Con 16-17 años o así, mis amigos y yo todavía nos pensábamos si ir al colegio a jugar al fútbol o salir con los amigos del instituto.
Hay tiempo para todo, o al menos antes lo había, porque parece que ahora ya no. El sábado voy después de comer a ver a mi novia a las 5 de la tarde y los chavaletes de 16 años pasan cargados con las bolsas para el botellón. Pasas por la plaza y los niños están sentaos en bancos con sus psp y ds en vez de pegando patadas a un balón y todo así.
#49 no digo que tenga que pasar nada, ni mucho menos. Es más estoy de acuerdo contigo en que la culpa es de ese miedo a lo que puede pasar, ese "por si acaso" que hace que los niños salgan cada vez menos. Mi comentario era en respuesta a quien un poco más arriba, decía que los niños están mejor en casa jugando a la play que "molestando" en la calle. De todas formas a mi las 12 o 1 no me parece una hora adecuada para niños menores de 10 años, pero supongo que cada cual conoce su barrio.
#3 a que vamos a estar todos los "veintegenarios" igual...
#45 en verano, con menos de 10 años, habia dias que estábamos hasta las 12 y 1 de la mañana en la calle pegando bicicletazos arriba y abajo y JAMAS pasó nada de nada. y eso que mi calle era una avenida para los yonkis, ya que habia un tio que pasaba caballo en cantidades industriales. a veces, hasta se echaban unos toques de balón con nosotros!!!! la gente hoy en dia está apoyardada y acojonada leche!! por eso las calles cada dia son más pestosas e individualistas. hemos perdido el sentido de barrio como se entedia antes... antes los padres no se planteban tanto las cosas para sus hijos: un niño lo que tiene es que jugar y relacionarse e ir aprendiendo lo bueno y, sobretodo, ir preparándose para lo mierdoso y malo que en esta vida le espera, contradiciendo la vida de rositas que tendriamos de mayores que, por lo menos a mi, me vendieron en la escuela... demasiado proteccionistas son la mayoria de los padres hoy en dia
recuperemos el espacio público!
retomemos nuestras calles, nuestras plazas y nuestros parques!
niños y adultos - salgamos a jugar a la calle
no hace falta irse a los años 20 del siglo pasado. a mediados de los pasados 90, mi barrio era un hervidero de gente, gente, niños, ancianitos todos en comunidad y nosotros jugando a miles de cosas que no requerian pilas... bueno, exeptuando algun que otro campeonato a dos jugadores con la game boy uno (epa!! estas partidas con la game boy, tb eran en la calle!!). aquellos años fueron el final de los juegos auténticamente callejeros. ahora mi barrio, por mucha acera y papeleras bonitas nuevas que tenga, da peste: los niños juegan AMARRADOS a sus padres (como si se los fueran a robar o se rompan como la porcelana) y luego de las 7.30pm no hay ni las ratas en la calle... ni en verano... maldita TV y maldita play station
#11 super surrealista eh.
Los niños son niños y tienen todo el derecho del mundo a divertirse. Deberían tener más sitios donde hacerlo, y que los padres los controlen(al menos los horarios) las 10 o las 11 no me parecen horas para que niños de las edades de las fotos estén en la calle(que pueden tener... 9-10 años??)
Además no creo que los juegos de ahora sean más divertidos que los de antes, creo que es justo lo contrario, ya te lo dan todo hecho, no hay lugar para la imaginación ni para el ejercicio. Recuerdo que no hace mucho a la niña de mi amiga le regalaron una goma y no sabía para qué era... nos costó bastante recordar como se jugaba, las canciones y los movimientos(yo siempre fui muy torpe y sólo sabía jugar bien a alturitas). Una semana despues estaban todas las niñas en el cole jugando a la goma y a la comba, y gracias a que las profesoras al verlas jugar les enseñaron un poco mejor que nosostras como se hacía ahora ya no juegan con las muñecas ni hablan de cosas que no tienen que ver con su edad(tiene 7 años y no paraban de hablar de ropita, maquillajes y mil cosas más que a mi por lo menos, no me parecen apropiadas para esa edad).
Y los cromos las gomas el pilla pilla los juegos de las niñas.
Estas generaciones no saben lo que se pierden...con lo bonito que era jugar a las diligencias con ..un caiman? WTF!
Todo eso es idilico, en esos años los niños hacian muchas barbaridades con la fauna, cazar ranas para atormentarlas,arrancar patas a insectos, disparar chinas a pajarillos , atar las típicas latas a la cola de los perros. Afortunadamente eso no lo he visto hoy en día.Bendita playstation
hoy en dia no sé como será en otros sitios, pero el parque al que iba de pequeña ya no existe, asfaltaron todo y ahora son plazas para aparcar los vecinos,(yo creo que no hacía falta más aparcamiento), se ve que alguien lo vio más útil que no un parque para niños. Ahora el único parque que hay cerca de mi casa no tiene columpios, sólo unos banquitos para que la gente se siente.. pero no hay nada para que los niños se diviertan...
La de los monges de Myanmar, en el 2007 no había variado en nada.
"la guerra de piedras"
DIOS MIO!!!111
fomentode la agresividad y el imperialismo!!!
Omnia mutantur, nihil interit
Felicidades por Inés irreductible.
Buaaa, buaaa, vamos a llorar porque los niños de ahora no se saben divertir como nosotros, buaaaaa... miralos, todo el día detrás de la pantalla de un ordenador..
oh, wait!!!