En 1968 Kubrick acababa de lograr un éxito mundial con 2001, una película que en un principio parecía que iba a ser un fiasco de taquilla. Pero los chicos del ácido y la marihuana vieron en ella, y sobre todo en su tramo final, todo un “viaje” en la pantalla del cine de su barrio. Ante las cifras de taquilla, la Metro aceptó financiar el siguiente proyecto de Kubrick, su Napoleón. En concreto la escritura del guión y los sueldos de los asistentes que contrató el director para documentarse
Comentarios
#5 Tú eres gilipollas y no lo has captado.
#6 Parafraseando a un payaso: " Te va a caer un strike que te cagas por insultos directos. "
Eres una persona ridícula y muy hipócrita, so bufón.
"Kubrick fue un cineasta con una tremenda ambición. Buscaba siempre “la película definitiva”. La película definitiva de la Guerra Mundial (Senderos de gloria), de la guerra nuclear (¿Teléfono rojo?, volamos hacia Moscú), de ciencia ficción (2001), de terror (El resplandor), de Vietnam (La chaqueta metálica)… Hacer “LA” película de Napoleón le motivaba y por eso sentenció: “Nunca se ha hecho una película buena o precisa sobre él”. Por desgracia olvidaba esa obra maestra, muda y de 1927, llamada Napoleón, de Abel Gance."
#1 No te olvides de Barry Lyndon y de la naranja mecánica... Te voto positivo a la noticia...
@Nonfotis ¿Spam de qué? ¿Tan ridículo eres que tienes que negativizar envios de cultura por ideologías politicas? ... Más rastrero no podías caer.
#4 Lo que das, recibes.
Tú mandas noticias chorras para pillar karma y luego ir negativizando noticias y comentarios contrarios a la independencia de forma injustificada.
Rastrero dice.
Esta conversación ha acabado aquí.
Un saludo.
Yo tengo el maravilloso volumen que se editó con sus apuntes para la peli. Es maravilloso y aterrador a la vez. El nivel de detalle es tremebundo. He pasado montones de horas contemplando su minucioso trabajo