En el fondo, al final da lo mismo, es una forma de quedar bien con los más desfavorecidos, que son los jóvenes. La única solución real sería hacer que el precio del suelo se compense de alguna forma, que el precio de la construcción esté más concentrado y que las promotoras hagan retorno de forma social parte de los beneficios conseguido.
|
etiquetas: derecho , vivienda , cataluna , ley