Con esta frase justificó Vera Svechina su actuación, una ciudadana rusa que protagonizó un rocambolesco incidente que tuvo lugar el pasado 14 de marzo. La joven protagonista de la historia, que había sido geisha en Japón y stripper en Rusia, vivía obsesionada con Google, hasta tal punto que se presentó en la sede de la compañía acosando a los cofundadores Sergey Brin y Larry Page. Cuando fue interrogada, se defendió diciendo que el propio Google de su cabeza le había dicho que lo hiciera.
Comentarios
Creo que es duplicada: A Google se le cuelan strippers locas en las oficinas
A Google se le cuelan strippers locas en las ofici...
gizmodo.esHay cada loco en este planeta...
Pobre Vera, Google esta en la cabeza de tod@s
Google me dice que entre mas en meneame que en otras paginas... Y que me compre un HTC