Hace 9 años | Por malditascully a granadablogs.com
Publicado hace 9 años por malditascully a granadablogs.com

Leo la noticia de Europa Press que dice que el Ministerio de Sanidad ha creado la guía “Más de 100 razones para que un menor no beba", que pretende enseñar a padres y a educadores a abordar el problema del consumo de alcohol en niños de entre 12 y 18 años. Esta medida esta incluida en la campaña "Menores ni una gota". Me parece bien, pero, ¿no sería mejor clausurar los botellódromos que hay en España, caso del que existe en Granada?. Hacemos campañas para que los niños no beban alcohol y, a la vez, habilitamos lugares para que lo hagan.

Comentarios

StuartMcNight

Al autor le sonará loquisimo, pero.... no creo que los botellódromos estén ahí para que los niños o los menores beban alcohol.

difuso

Yo los botellódromos los veo bien, creo que hay mucha hipocresía con ese asunto. Me explico:

1) Por un lado, beber mucho es malo, es ilegal vender alcohol a menores, etc.
2) Por otro lado, las copas son caras en los pubs.
3) Finalmente: hay gente (muchos de ellos, menores) que van a salir el fin de semana a beber sí o sí. Y pretenden gastarse lo mínimo posible (vamos, que acabarán de botellón).

Ignorar los hechos 2) y 3) no implica que dejen de ocurrir. A mí me gustaría que hubiera opciones culturales y de todo tipo para poder hacer un fin de semana por la noche pero, no nos engañemos, hay un porcentaje alto de esos jóvenes que van a los botellódromos a los que la cultura les importa un pimiento.

En Granada (caso concreto del que se habla), ciudad eminentemente universitaria, había un problema importante de convivencia pública. Básicamente, manadas de jóvenes (miles) se aglomeraban en la plaza que tocaba por aquel entonces (Albert Einstein, Gran Capitán, la "plaza de los pijos") y hacían botellón con la consiguiente molestia para los vecinos (fundamentalmente de ruido y limpieza). En teoría esto ya no está permitido y un policía municipal puede aplicar la ordenanza local y multarte por hacer botellón. En el botellódromo, que está en la ciudad pero apartado (al lado de la circunvalación), no se molesta a nadie. Y aunque se sigue ensuciando (hay quien no usa las papeleras), la suciedad se concentra en una zona (lo que hace más fácil su limpieza).

El caso del botellódromo demuestra que a veces es mejor aplicar políticas pragmáticas: en este caso es un win(vecinos)/win(jóvenes), dado que el problema de fondo (el 2) y sobre todo el 3)) no van a solucionarse de por sí. Es más, yo diría que el hecho de que el botellódromo exista ha hecho que la gente beba menos (ya no es un acto tan "prohibido"). No tengo cifras pero tengo esa impresión.

Respecto a los menores, que es el problema que menciona el juez Calatayud en su blog, no creo que la mejor solución sea la eliminación de los botellódromos. Sinceramente, no sé qué hace un menor de 15 años un sábado de madrugada bebiendo en la calle, cuando tendría que estar en casa. En mi opinión, el problema es más de educación (tal y como siempre denuncia Calatayud) que de legislación. Es más, creo que la gran mayoría de usuarios del botellódromo son mayores de edad.

Shalai

#4 Muy bien explicado. Además sumaría el hecho de que, la única solución que ha aportado, por ejemplo, el ayuntamiento de Granada es hacer el botellódromo. Punto. Antes, creo recordar en algunas fiestas de la primavera, ofrecían alternativas y distracciones varias para que la gente que quisiere pudiese hacer otras cosas que no fuesen sólo beber, tales como conciertos, prácticas deportivas (rocódromos, pequeños juegos...) En mi opinión, se puede aprovechar la concertación de gente que se produce en los botellones para enseñar alternativas viables, divertidas y baratas a la gente que lo desee, y estoy segura de que, aunque se seguirá bebiendo, al menos habrá algunos jóvenes que preferirán la alternativa.

D

Yo creo que están ahí para evitar que los jóvenes estén dispersados por toda la ciudad. Así evitas que manchen por todas partes y molesten a los vecinos.

No me parece mal, la verdad.

voidcarlos

¿no sería mejor clausurar los botellódromos que hay en España, caso del que existe en Granada?

Los botellódromos son una huida hacia delante de los ayuntamientos. Los jóvenes, si quieren beber, van a beber, qué mejor que hacerlo en un lugar habilitado para ello donde la molestia sea mínima. Quitar los botellódromos implica que todos aquellos que van a los botellódromos (y la gran mayoría son mayores de edad (incluso diría que en el de Granada casi todos son mayores de edad)) van a ir a otras partes de la ciudad donde a todas luces van a molestar más.