En la provincia de Ciudad Real hay más aeródromos privados que en ninguna otra. Operan, al menos, seis pistas con sus códigos de Aviación Civil. Y otras dos están en tramitación. Cinco de ellos están pensados para dar servicio a grandes cotos de caza. Son una pieza crucial en el sistema de cacerías de lujo de Castilla-La Mancha que se desarrolla en buena parte en la zona de reintroducción de lince ibérico.
Comentarios
Que asco me dan.
Lo de no querer que especies se extingan es taaaaan de pobre...
¡Claro no tienen aeropuerto chachi! como el de Fabra.