A mi ya me empieza a parecer que el hijo le importa tres cojones, sólo le vale ganar y que le den la razón cueste lo que cueste.
Ánda que no ha tenido tiempo de arreglarse con el padre y pasar tiempo con el chaval, que cualquiera pensaría que es lo importante, en vez de hacerle crecer en este ambiente, y ahí sigue con la matraca.
#39 Ahora, con 14 años y artrosis, unas 14. Las mismas que yo, porque vivo en el campo y siempre sale conmigo. Y sí, quiere estar conmigo, porque no tiene por qué seguir a mi lado, se puede ir cuando quiera, y de hecho lo hace cuando le da la gana.
Mi perro es parte de mi familia, es mi compañero y mi hermano, pero ni hijo ni humano ni hostias. Es un perro.
Allá cada cual, pero no yo no tengo que ver en mi perro a un hijo para disfrutar de su amor y compañía.
Como le quiero mucho y quiero lo mejor para él, me voy yo al río y al monte con él a llenarme de mierda de todos los colores en lugar de ponerle ropa y llevarle al psicólogo porque ladra.