Subir los impuestos puede ser una medida completamente estéril dada la actual situación de la economía española, e incluso podría conducir a una rebaja de la recaudación. Subir impuestos en medio de una recesión es justo lo contrario de lo adecuado, según Alberto Matellán, analista de Inverseguros. “En España, en la coyuntura actual, una subida de impuestos tendría muy poca o nula efectividad a largo plazo en cuanto al incremento de recaudación”. La idea de que la reducción del déficit se consiga subiendo impuestos es muy discutible, explica.
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