Comparado con Spotify, MySpace parece una página creada en el difunto Geocities y Pandora un fallido intento (fue bonito mientras duró) de convertirse en en lo que es Spotify: la base de datos definitiva de la música. Pero Spotify se ha dado cuenta de hasta qué punto puede resultar molesta su publicidad y la utiliza como puya para redirigir el público hacia el redil del servicio Premium.
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