El Festival Internacional de Cine Fantástico de Catalunya consagra este año a una directora mujer, abre su programación a nuevas voces y demuestra que el género puede ser también un acto político de resistencia. Porque el monstruo fue mujer. Y no como víctima, ni como trofeo. Sino como autora, como voz que decide dónde poner la cámara y desde qué herida mirar el mundo.
|
etiquetas: sitges , terror , feminismo