El periódico The Independent publica una investigación del prestigioso periodista de guerra Robert Fisk que visitó la clínica de Siria en el centro de una crisis mundial de armas químicas. “todos los médicos lo saben. Hubo muchos bombardeos [del gobierno], pero esa noche, hubo viento y grandes nubes de polvo entraron en los subterráneos donde estaba la gente. La gente empezó a llegar aquí sufriendo hipoxia, pérdida de oxígeno. Entonces un Casco Blanco gritó “¡Gas!” y empezaron a arrojarse agua en pánico. Pero sí, el vídeo es genuino..”
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https://www.independent.co.uk/voices/syria-chemical-attack-gas-douma-robert-fisk-ghouta-damascus-a8307726.html
Enlace original, en inglés
Robert Fisk es escritor y periodista inglés. Ha sido corresponsal intermitente de Oriente Medio desde 1976 para varios medios de comunicación; desde 1989 ha sido corresponsal de The Independent, principalmente con sede en Beirut. Fisk ha sido galardonado con numerosos premios británicos e internacionales de periodismo, entre los que se incluyen los Premios de la Prensa al Periodista Extranjero del Año en siete ocasiones. Ha publicado varios libros y ha informado sobre varias guerras y conflictos armados.
#0 #1 Tu tranquilo, en seguida llega alguno a informarnos que es "propaganda putinita"
SI hubiera sido gas de verdad esa gente estaría echando sangre entre gritos agónicos de dolor. La clorina entra en reacción con la humedad formando ácido clorhídrico, que deshace los entre otras cosas los pulmones.
Ni que decir tiene que con agua y gasas empapadas no se quita.
Hasta los médicos estarían gritando de dolor si no llevan protección NBQ.