Publicado hace 10 años por esceptica a sevillanadas.blogspot.com.es

En 1857 un grupo de jóvenes sevillanos es fusilado en Plaza de Armas. Sevilla está consternada y su alcalde, roto de dolor, se sienta a llorar su desdicha en una piedra situada a las afueras de la Puerta Real. Su crimen capital, sublevarse contra la desastrosa situación en la que estaba sumido el país. Esa piedra aún hoy existe: es la Piedra Llorosa.

Comentarios

esceptica

He dudado en enviar la noticia por el horrible formato en que está escrito, con numerosas palabras en negrita por todas partes que dificultan su lectura. El caso es que el texto me ha parecido muy bien redactado, y el hecho histórico en sí muy interesante.

Por otro lado, si lo enlazamos con la época actual, eso de fusilar a un centenar de jóvenes cuyo crimen capital fue "sublevarse contra la desastrosa situación en la que estaba sumido el país", le sonará a más de uno... desgraciadamente.