Cuando preparamos un pan en casa, queremos que resulte sabroso, aromático, con buena miga, corteza gruesa y crujiente, muy crujiente, y claro que tenga un aspecto bonito. Todo eso supone práctica, no voy a negároslo, pero hay una forma de atajar gran parte de esos logros. ¿Cómo? Con el horneado en nuestra cocotte de hierro "Le Creuset".
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etiquetas: pan , cocotte , cocina 
Cuando me dió por hacer pan, una buena temporada, con una receta similar sacada de un libro de Ibán Yarza llegué a ser un carapán con un peso estable de 108 kg.
¡PELIGRO!
No me aparecía ir a comprar pan y ya que está la cocina de leña aprovecho de ahí la cocotte.
En mi humilde opinión no sabes de lo que hablas.
Igualmemte, los hobbys son para eso, disfrutar y gastar dinero, y cada uno tiene los suyos sin pretender entender los de los demas.
Incluso lo puedes comprar online.
El progreso viene de la especialización.
Me gusta la cocina y prefiero dedicar mi tiempo a actividades más elaboradas que cocer un pan, habiendo panaderías que lo hacen infinitamente mejor que yo, por calderilla. Empezando por la masa madre y acabando en el inmenso gasto de energía que supone hacer pan en casa.
En todo caso seguro que tiene una calidad aceptable, comparando con la mayoría del pan que podamos encontrar a la venta.
En Lavapiés, Madrid, a veces he comprado en Panifiesto que sí que elaboraban completamente su pan.
A mí también me gusta hacer mi propio pan con mi propia masa madre, quizás no sea muy práctico a nivel económico o energético, pero es gratificante hacerte tu propio pan.