Miles de estadounidenses negras que antes sostenían la economía del área del golfo de México, al realizar los trabajos más duros por un magro salario, quedaron abandonadas a su suerte desde que los huracanes Katrina y Rita devastaron la región hace un año. En este artículo se analiza la situación actual por la que atraviesan estas mujeres, las más golpeadas por el desastre y las que cuentan con los peores salarios de todo Estados Unidos. Desde el desastre, el desempleo femenino ha aumentado más que el masculino.
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