Cada año perdemos un número incontable de horas en los atascos de tráfico, pero lo más frustrante es que muchos de ellos no parecen tener una causa aparente, es decir, que no se deben a un accidente, a un vehículo averiado o a obras en la carretera. Ahora, un equipo de científicos del Instituto Tecnológico de Massachussets (MIT) ha desarrollado un modelo que describe cómo y bajo qué condiciones se forman estos “atascos fantasma”, lo que podría ayudar a los diseñadores de las carreteras a minimizarlos.
Comentarios
Para los atascos que se producen como "de la nada":
Realmente hacer caso a esas señales que dicen "80" antes de los atascos alivia el atasco, porque para cuando has llegado, les has dado tiempo a arrancar a los que se han quedado medio parados. Lo que pasa es que los conductores, viendo una autopista medio despejada y yendo tan felices a 120, les cuesta mucho reducir la velocidad, con lo cual lo único que hacen es acumularse en el atasco y maldecir.