Lo primero es salvarnos a nosotros. Hacer las cosas como siempre porque queremos salvar la Navidad es pan para hoy y pandemia para mañana. Si tenemos buenas reuniones el 25 de diciembre, el 25 de enero tenemos un montón de muertos, los hospitales colapsados y un yoyó de confinamientos: nos confinan, bajan los casos, nos relajamos, vuelven a subir los casos y vuelta a los confinamientos. Esto es extraordinariamente destructivo para la salud y para la viabilidad del país.
Comentarios
#4 Una cosa es que lo sepamos y otra cosa es que nos la sude.
Recomiendo seguir los enlaces de esta nota que puse el otro día @noexisto
#9 TL,DR
#10 lo has escrito mal https://en.m.wikipedia.org/wiki/TL;DR
Me da a mi que esto lo sabemos todos menos los que lo tienen que saber.
#1 Los que lo tienen que saber ya lo han dicho: Pedro Sánchez insinúa que la Navidad será "a distancia" para "evitar una tercera ola"
Pedro Sánchez insinúa que la Navidad será "a ...
vozpopuli.com#2 nnanananananaa liderr... Líder.. Liderr
#16 Piensa el ladrón...
#1 Si lo sabemos todos no debería hacer falta que nadie nos obligue a comportarnos.
#1 Percebes como los que dan medallas a la virgen son los que están gobernando en la CAM. El niño jesús es superimportante de la muerte.
#5 sinceramente, no creo que tenga absolutamente nada que ver con la religión. La campaña de navidad es una de las más rentables del invierno, sino la que más, son días de fiestas, comilonas, quedadas con amigos en restaurantes y bares, compras compulsivas. Eso no tiene nada que ver con la religión, y a esto se unen ateos de todas las religiones. Eso es lo que defienden. Mientras nuestra columna vertebral económica sean los servicios, y eso fue lo que hicieron el PPsoe de los 80 y 90, desmontar la industria para centrarse en los servicios, parar campañas de navidad, Semana Santa o verano nos hunde de sobremanera.
#18 Llevo comprando por Amazon desde que ha empezado el virus, tengo el Prime, y ahora ya es que paso de salir aunque nos desconfiten... Lo que me faltaba, hordas de paletos en los centros comerciales disfrutando del consumismo de mierda.
Una Navidad sin una buena bronca con mi cuñado, y la Tata llorando borracha no es Navidad...
Yo, con Martínez, venga cervecitas.
“Si tenemos buenas reuniones el 25 de diciembre, el 25 de enero tenemos un montón de muertos, los hospitales colapsados y un yoyó de confinamientos”
El texto colaborativo, sobre protección ante aerosoles, creado por varios científicos es fantástico: https://translate.google.com/translate?hl=en&sl=en&tl=es&u=https%3A%2F%2Fdocs.google.com%2Fdocument%2Fd%2Fe%2F2PACX-1vTgVkamic82Ux90zCWb5NFC6gYcDSWKYxKgh2y49uHQ5OJfGBAuQXs8igbmOaGqODI9wJ0UUnpo1dZu%2Fpub
Yo no sé cómo todavía no se han dado cuenta de que, en un porcentaje muy alto, la gente tiende a respetar las normas (todo tipo de normas) que no le molestan o que no le afectan personalmente. En el momento que una norma perjudica o es contraria a sus caprichos, sus costumbres, sus necesidades o su actividad, la cosa ya cambia.
¡Que le den por el culo a la navidad! ¡A quién hay que salvar es a los abuelos para que la próxima navidad la puedan celebrar!
La Navidad no se salva porque en ningún momento ha querido salvarse. Metes un confinamiento domiciliario de un mes y a ver cuántos casos hay después... Pero no se ha querido. Desde que se declaró la nueva normalidad y que hay que convivir con el virus ya pasan, nos han dejado solos con la pandemia. No tenemos un gobierno como en China, que protege a la población y vela por su vida, salud y libertad. Aquí que se mueran todos los que se tengan que morir mientras no colapsen los hospitales. Otro logro de «la libertad y la democracia».
Igual que los bares, metro, etc. pero esos no cierran; ahora lo que toca es sentirse mal por cenar un puto día con tu familia, pero al capital ni tocarlo.
Cuando se reunieron con la OMS, el profesor señala que la organización no aceptó las evidencias que el grupo le puso sobre la mesa y no fue hasta que la revista Clinical Infection Diseases publicó en julio una carta firmada por estos científicos y otros, 239 en total, cuando el organismo internacional modificó tímidamente su postura hablando de “hipótesis de contagio por aerosoles”, en un documento que para Jiménez “es muy poco claro”.