Hace 14 años | Por Lapices. a publico.es
Publicado hace 14 años por Lapices. a publico.es

Adolfo Pérez Esquivel (Buenos Aires, 1931) llega a la entrevista con sandalias y el pelo alborotado. El premio Nobel de la Paz en 1980 tiene la voz dulce y parece como si, para él, el tiempo no tuviera importancia y pudiese pasarse toda una vida hablando de lucha, de cambios y de esperanzas.

Comentarios

D

En un pasado no tan reciente cometieron demasiadas demasiadas barbaridades y crímenes de los que aún deben de avergonzarse. (Contra nicaragüense, Pinochet, Canal panamá, Cuba-Fidel Castro, el cerdo de Kissinger con el Plan Condor, escuadrones de la muerte en El Salvador....la lista es interminable)

Fuller

Si, siempre es culpa de los demás...

D

#3 #4

El antiyan-quismo latinoamericano fluye de cuatro orígenes distintos: el cultural, anclado en la vieja tradición hispanocatólica; el económico, consecuencia de una visión nacionalista o marxista de las relaciones comerciales y financieras entre «el imperio» y las «colonias»; el histórico, derivado de los conflictos armados entre Washington y sus vecinos del sur, y el sicológico, producto de una malsana mezcla de admiración y rencor que hunde sus raíces en uno de los peores componentes de la naturaleza humana: la envidia.

A este tipo de idiota latinoamericano —el más atrasado en la escala zoológica de la especie— le molestan las ciudades limpias y cuidadas de Estados Unidos, su espléndido nivel de vida, sus triunfos tecnológicos, y para todo eso tiene una explicación casi siempre rotunda y absurda: no es una sociedad ordenada, sino neurótica, no son prósperos sino explotadores, no son creativos, sino ladrones de cerebros ajenos En la prensa panameña —por ejemplo— se ha llegado a pu! blicar que los jardines cuidados de la zona del Canal y las casas pintadas —y luego entregadas a los panameños— no formaban parte de la cultura nacional, lo que justificaba su transformación en otro modo de vida gloriosamente cochambroso y caótico, pero nuestro.

Los yanquis, para el idiota latinoamericano, desempeñan además, un rol ceremonial extraído de un guiónnítidamente freudiano: son el padre al que hay que matar para lograr la felicidad. Son el chivo expiatorio al que se le transfieren todas las culpas: por ellos no somos ricos, sabios y prósperos. Por ellos no logramos el maravilloso lugar que merecemos en el concierto de las naciones. Por ellos no conseguimos volvernos una potencia definitiva.

¿Cómo no odiar a quien tanto daño nos hace? «No odiamos al pueblo gringo —dicen los idiotas— sino al gobierno.» Falso: los gobiernos cambian y el odio permanece. Odiaban a los gringos en época de Roosevelt, de Truman, de Eisenho-wer, de Kennedy, de Johnson, de Nixon, de Cárter, de Clinton, de todos. Es un odio que no cede ni se transforma cuando cambian los gobiernos.

¿Es un odio, acaso, al sistema? Falso también. Si el idiota latinoamericano odiara el sistema, también sería anticanadiense, antisuizo o antijaponés, coherencia totalmente ausente de su repertorio de fobias. Más aún: es posible encontrar antiyanquis que son filobritanicos o filogermánicos, con lo cual se desmiente el mito de la aversión al sistema. Lo que odian es al gringo, como los nazis odiaban a los judíos o los franceses de Le Pen detestan a los argelinos. Es puro racismo, pero con una singularidad que lo distingue: ese odio no surge del desprecio al ser que equivocadamente suponen inferior, sino al que —también equivocadamente— suponen
superior. No se trata, pues, de un drama ideológico, sino de una patología significativa: una dolencia de diagnóstico reservado y cura difícil.

Manual del perfecto Idiota Latinoamericano, Capitulo XI "Yanki, go home" http://www.scribd.com/doc/6134674/Manual-Del-Perfecto-Idiota-latinoamericano

eduardomo

Mas que una espina diria que una lanza.

eduardomo

#6 El gusto de los EEUU por Latinoamerica viene de antes, de la administración Monroe y su política del "gran garrote"

chiptronic

Sería interesante que además de leer a Vargas Llosa leyeras el libro "La arrogancia del poder" donde William Fulbright analiza, ya en 1967, la política exterior estadounidense. Y es interesante este libro ya que Fullbright fue Presidente del Comité de Asuntos Exteriores del Senado así que ha de saber del tema.

Los países latinoamericanos,y no solo los latinoamericanmos sino también los de medio oriente, suelen recibir innumerables críticas de las distintas administraciones estadounidenses, críticas que no siempre se quedan solo en eso. El derrocamiento de Salvador Allende fue financiado por la ITT y la CIA, el golpe de estado en Irán que pone al Sha Reza Pahlevi en el poder fue promovido e impulsado por la CIA. También podemos recordar el asunto "contras nicaragüenses" durante el gobierno de Ronald Reagan que hizo célebre a Oliver North, al menos por un tiempo. Los militares lationamercianos educados en terrorismo de Estado en la Escuela de las Américas "situada desde 1946 a 1984 en Panamá, donde actualmente -y desde el año 2000- funciona el hotel Meliá Panamá Canal. Se graduaron más de 60.000 militares y policías de hasta 23 países de América Latina, algunos de ellos de especial relevancia por sus crímenes contra la humanidad como los generales Leopoldo Fortunato Galtieri o Manuel Antonio Noriega" (Extraído de Wikipedia).

¿Es, entonces, fruto de la locura o de la sin razón suponer que los Estados Unidos han causado muchos de los males que aquejan a los países latinoamericanos? Diga lo que diga Vargas Llosa la historia es rica en este tipo de hechos, Fullbright mismo menciona que la intervención de los Estados Unidos en Santo Domingo en abril de 1965 ( http://es.wikipedia.org/wiki/Juan_Bosch ).

Existe, entonces, una historia negativa entre los EE.UU. y los países latinoamericanos que puede ser oportunamente manipulada para exacerbar un sentimiento anti-yanqui y conseguir con ello distintos propósitos, pero es esa historia la que genera el sentimiento anti-Estados Unidos, no la ignorancia ni la locura.

D

#3 Creo que el canal de Panamá es algo de lo que no avergonzarse.

Por cierto, es tío este da pena. Repite eso de que "en EEUU no hay democracia real, gobiernan las multinacionales y blablabla...". Siempre hay excusas para echarle la culpa a EEUU.