"La inmigración es un reto que se ha de gobernar". Esta es una de las frases preferidas del nuevo ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho. El hasta hace poco alcalde de l´Hospitalet de Llobregat ha desplegado en una ciudad con un 24% de inmigrantes una política migratoria donde ha compaginado la tolerancia cero hacia las situaciones conflictivas y la inseguridad con una voluntad de mediación y una política de apoyo a la entidades asociativas.
Comentarios
Parecen muy interesantes esas propuestas, está claro que es un tema que preocupa y por eso le han puesto a él en este Ministerio. Estaremos expectantes
Buf, algunas ideas son buenas... La protección contra los saraos con vallenato a la 1 de la mañana del miércoles es primordial. Lo de los pisos patera, hay que evitarlo: ¡En muchos casos son los propios inmigrantes ýa instalados los que más explotan a sus compatriotas!