Si fuera niño me encantaría volver a esas aulas y que lo primero que me enseñaran a escribir fueran las siguientes preguntas: ¿Quién? ¿Por qué? y ¿Para qué? Y es que no hace falta abrumar a los niños con pesadas cátedras de filosofía, cuando se puede comenzar por algo tan sencillo como el arte sano de cuestionarse. (...) El deber de todo ser pensante e inteligente debe ser siempre cuestionarse, sobre el mundo, la sociedad, la información, el mercado, y todo aquello que pueda interferir en la vida del ser humano y los individuos.
|
etiquetas: pensar , preguntar , criticar