Almeida, Vingegaard y Pidcock han subido a un podio improvisado con una neveras y la entrega de premios se ha celebrado en el párking del Visma en una ceremonia privada.
Esto es Israel: el perro del hortelano, que ni come ni deja comer. Todo lo que tocan lo convierten en mierda. Lo mismo que pasó con Eurovisión, lo mismo que pasa en competiciones europeas de fútbol y baloncesto.
Si los hubieran echado de todas las competiciones como hicieron con Rusia, podríamos estar disfrutando de competiciones normales a la par que seria una medida de presión para parar el genocidio.
Lo siento, pero voto marujeo. En privado que los ciclistas hagan lo que quieran. Espero que lo celebren y disfruten todos menos los del equipo blanqueador de asesinos. Las protestas ya han conseguido lo que debían.
Si los hubieran echado de todas las competiciones como hicieron con Rusia, podríamos estar disfrutando de competiciones normales a la par que seria una medida de presión para parar el genocidio.